La locomotora brasileña no tiene freno. En el primer semestre del año las exportaciones de carne vacuna del vecino siguieron creciendo y a un ritmo acelerado. También aumentaron las de Uruguay. Ambos países aprovechan la creciente demanda mundial para exportar cantidades crecientes. Mientras, las ventas al extranjero de Argentina cayeron 20% esta mitad de año.
Entre enero y junio Brasil exportó 1,29 millón de toneladas, 13% por encima de igual lapso de 2024. El ingreso de divisas fue de 6.562 millones de dólares. “Estas cifras son los máximos históricos en volumen y en valor respectivamente”, informó el analista Ignacio Iriarte.
En tanto, solo en junio “Brasil exportó 241 mil toneladas de carnes bovinas enfriada y congeladas, por un valor total de 1.314 millones de dólares, que fueron un récord para ese mes en volumen y el máximo histórico mensual en valor”, preció Iriarte, quien agregó: “hubo un nuevo incremento en el precio medio, con casi 5.450 dólares por tonelada, superó en un 22% al de junio de 2024”.
Así, queda claro que Brasil aprovecha con todas sus fuerzas las posibilidades que brinda el mercado mundial. Su gran competidor, Estados Unidos, está atravesando una crisis productiva enorme que tiene diferentes aristas. Quienes conocen ese país dicen que los ganaderos tienen un serio problema de sucesión porque sus hijos no se hacen cargo de las empresas familiares y que no tienen cómo manejar las vacas, por lo que terminan alquilando los campos.
Esto redujo el stock de vacas estadounidense, que es el más bajo en muchas décadas, mientras se achicó su producción de carne, las exportaciones e incluso se incrementaron las importaciones de carne.
Otro país que aprovecha la situación es Uruguay. Las ventas a Estados Unidos, que paga 5.500 dólares entre la carne que tiene cupo arancelario preferencial y la que entra por fuera de esa cuota, crecieron 30% en lo que va del año. Mientras tanto, las exportaciones a China, que paga menos, unos 4.800 dólares de promedio, cayeron 15%.
Las exportaciones de carne vacuna de Uruguay también crecieron este primer semestre. Respecto de enero/junio de 2024 sólo un 3%, pero con relación a 2023 el aumento fue de 12%.
En el mercado mundial hay además dos gigantes que están en guerra comercial, Estados Unidos y China, que necesitan de cada vez más carne. La Argentina está aprovechando mucho menos de lo que podría este escenario.
Los crecientes costos en dólares y la situación cambiaria afectaron al negocio, sobre todo en el primer cuatrimestre. La tendencia parece haber cambiado en mayo y junio, pero aun así la cantidad de carne vacuna vendida es menor a la de 2024. Las estadísticas del gobierno señalan que las exportaciones cayeron 20% con relación al año pasado.