El sorgo ganó terreno durante la campaña 2024/25 y merece un aplauso. Siendo uno de los cultivos que capitalizó los graves efectos causados por el Spiroplasma en la campaña maicera 2023/24, lo que derivó en recortes del 20% del área sembrada en el ciclo 2024/25, el sorgo registró un aumento del 25% interanual en su superficie sembrada. De igual forma lo hizo su producción, que ascendería a las 3,2 millones de toneladas, un 27,2% más respecto a la campaña anterior.
“Se trataría de la segunda mejor producción en los últimos 12 años”, destacó un reciente informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), que afirmó que su distribución territorial ya es amplia.
Las provincias en las que el cultivo posee la mayor área sembrada de la campaña son Santa Fe, con 231.850 hectáreas (Ha); Santiago del Estero, con 158.560 Ha; y Córdoba, con 147.520 Ha. Por detrás queda Buenos Aires, con 128.717 Ha, seguida en quinto lugar por Entre Ríos, con 117.600 Ha.
Respecto de su cosecha, a nivel nacional ya alcanza el 51%, cuatro puntos porcentuales por encima del promedio de los últimos cinco años para esta fecha.
“El estado general del sorgo es mayormente favorable, con un 70% de los lotes clasificados entre buenos y muy buenos, un 22% en condición regular y un 8% en estado malo, concentrado en áreas con estrés hídrico y temperaturas elevadas. Los rindes son dispares a nivel nacional, alcanzando hasta 55 qq/Ha en partes de Córdoba y Entre Ríos, mientras que, en partes de Chaco y zonas puntuales de la provincia de Santa Fe, bajan hasta un entorno cercano a los 25 qq/Ha”, detallaron desde la BCR.
Del total obtenido, se espera que 1,5 millones de toneladas se destinen al mercado interno, mientras que a la exportación se volcarían 1,5 millones de toneladas, lo que supone un aumento del 34% interanual.
“Se espera que la mayor oferta de la campaña permita generar un mayor flujo de exportaciones. Dado que prácticamente la totalidad del sorgo que está exportando Argentina tiene como destino a China, es clave monitorear lo que suceda con este mercado para tener una perspectiva más clara acerca del futuro de las exportaciones”, afirmó la BCR en su informe.
De acuerdo con el International Grains Council (ICG), la reducción de las importaciones de sorgo que se espera del gigante asiático, atribuidas principalmente al conflicto comercial con Estados Unidos (que en escenarios normales es su principal proveedor), redireccionaría sus compras a otros países, entre los que esta Argentina.
“El ICG estima que en el ciclo 2025/26, prácticamente la totalidad de las importaciones de China provendrían de Argentina, Australia y Brasil, habiendo este último país recibido habilitación para exportar sorgo a China en noviembre de 2024”, indicó el informe.