Desde diciembre de 2019, la Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) administra, dentro de la Estación Experimental J. Hirschhorn, una “Biofábrica Escuela” que propone la provisión, elaboración y construcción de conocimientos en torno a bioinsumos, como parte de una iniciativa que apunta a la transición agroecológica.
Ahora, gracias a una habilitación del Ministerio de Desarrollo Agrario (MDA), estos preparados podrán ingresar formalmente al mercado y comercializarse en todo el territorio provincial.
El permiso, que fue entregado por el ministro Javier Rodríguez a las autoridades de la Facultad, no solo certifica que la Biofábrica Escuela cumple con los estándares exigidos para la producción y comercialización de biopreparados, sino que además la deja inscripta en el “Registro de Biopreparados” de la provincia (ReBio), lo que reglamenta la elaboración, uso y venta de estos productos con el objetivo de promover su desarrollo.
Dentro del portfolio de productos ofrecidos por esta Biofábrica, se destacan algunos como el purín de ortiga, utilizado como fertilizante y estimulador del crecimiento; la decocción de cola de caballo, que produce una acción fungicida, insecticida y bioestimulante; las infusiones de manzanilla y Santa Rita; y otros preparado a partir de especies vegetales y sales minerales, que involucran procesos de fermentación, decocción y macerado. Todos ellos apuntan a mejorar la salud del suelo y los rendimientos de los cultivos, sin generar impactos negativos en el ecosistema.
“El objetivo es promover la transición agroecológica a partir en una primera etapa vinculada a la sustitución de insumos. De esta manera se busca minimizar la dependencia de productos importados, de alto costo, muchas veces inaccesibles para los productores familiares de la región, consolidando así esquemas productivos más diversificados, autónomos, sustentables y resilientes”, señalaron desde esa Facultad.
Hay que aclarar que además de ser un centro de producción, del que participan docentes, no docentes y estudiantes de esa Facultad, el establecimiento también se erige como escuela al proponer un diálogo con productores de la zona, donde no solo se los capacita en materia de bioinsumos sino que también se los acompaña en su aplicación.
Es así que desde 2021, el proyecto contempla la realización de ensayos en Chacras Experimentales en Carhué, Mercedes, Gorina y El Pato, en convenio con el MDA.
En este sentido, los responsables de la planta destacaron que, en el contexto económico actual, los insumos de las biofábricas van a tener cada vez más demanda por parte de los productores.
“Aquí los productores tienen la posibilidad de reducir los costos y mejorar la producción de un modo sustentable, sin perjuicio para la salud y el ambiente”, sostuvieron.
Durante la entrega de la habilitación, Rodríguez destacó la importancia de que los distintos sectores productivos cuenten con reglamentos claros para sostener su actividad, con buenos estándares de calidad.
“Nosotros en la provincia de Buenos Aires, tenemos una normativa para biopreparados y biofábricas que garantizan ciertos estándares y con eso promover su crecimiento y desarrollo”, afirmó, y añadió que si bien el gobierno dice que “quitar todo tipo de normativa es mejor”, para los consumidores resulta fundamental saber qué están comprando.