La políticas de Estado, como su nombre lo indica, se implementan para ser ejecutadas por un país sin importar cuál sea el gobierno de turno. Uruguay puede dar testimonio la respecto.
El país oriental implementó en 1987 dos políticas de Estado que en la actualidad –37 años después– promovieron la creación de un sector forestoindustrial que constituye el principal exportador de la nación.
El presidente uruguayo Luis Lacalle Pou participó este jueces en Uruforest 2024, una feria forestal a cielo abierto que se desarrollará hasta el próximo 12 de octubre en la localidad de Juan Lacaze, Colonia, en un predio de 75 hectáreas. En la misma participan más de 200 empresas expositoras y 8000 técnicos.
“La historia reciente ha demostrado en foros internacionales que tanto el monte nativo como el plantado por nosotros nos sirve en términos ambientales”, sostuvo Lacalle Pou en referencia al reglamento 1115 de la Unión Europea.
Uruforest 2024 se realiza a cielo abierto y es el primer evento de este tipo en el país. Comprende 40 hectáreas que fueron forestadas y están en distintas etapas de crecimiento; también incluye muestras activas de cosecha, plantaciones, astillado de madera y actividades de vivero.
Por su parte, el ministro de Ganadería y Agricultura, Fernando Mattos, señaló la relevancia del evento y describió al sector forestal como la cadena de valor productiva más importante del país. Y recordó que su desarrollo es fruto de una política de Estado exitosa, respetada por todos los gobiernos desde el retorno a la democracia luego de que se implementara la Ley Forestal Nº 15.939 del 28 de diciembre de 1987.
Eso política, indicó Mattos, “ha proyectado al sector en un desarrollo constante y a ser el principal rubro de exportación del país”, además ser “el corolario del proceso de las tres inversiones históricas más importantes del Uruguay, que incluye las plantas de celulosa”, expresó en referencia a las industrias UPM y Montes del Plata.
“Este rubro apunta a tener, en los próximos años, 4000 millones de dólares de ingreso”, detalló Mattos, y aseguró que la cadena forestal será, por bastante tiempo, la más relevante en el progreso del Uruguay y generadora de empleo de calidad en el interior del país.
Los últimos datos oficiales muestran que la celulosa volvió a encabezar el ranking de exportaciones uruguayas en setiembre de 2024, con ventas que alcanzaron los 260 millones de dólares, lo que representó un incremento de 36% en comparación con setiembre de 2023.
Esta semana, por otra parte, la ministra de Economía uruguaya, Azucena Arbeleche, participó en una presentación sobre los principales resultados de la gestión en zonas francas entre 2020 y 2024.
En la actualidad, hay doce zonas francas en funcionamiento en Uruguay que generan más de 21.000 puestos de trabajo y representan el 6,6% del producto bruto interno (PBI), el 35% del total exportado y un 10% de lo invertido en el país.
Arbeleche señaló en el evento que la Ley de Zonas Francas Nº 15.921, del 17 de diciembre de 1987, implica importantes beneficios fiscales para el desarrollo y el crecimiento y que se ha consolidado a lo largo de estos años con el objetivo de promover y potenciar tanto las inversiones como la generación de empleo y el aumento de las exportaciones. Asimismo, afirmó que el sistema se destaca por su seguridad jurídica y el respeto a los derechos adquiridos y que es un ejemplo en la región por el impacto que genera en la economía nacional.
Las dos plantas de pasta celulósica de UPM y la fábrica de Montes de Plata, precisamente, están localizadas en zonas francas con importantes beneficios tributarios y cambiarios.
“El objetivo fundamental es que Uruguay continúe siendo atractivo para captar inversión extranjera directa, y, para esto, el diálogo con todos los actores involucrados es fundamental”, consideró la ministra.