Hace pocos días el gobierno nacional fijó -con varios meses de demora- nuevos valores para los biocombustibles que se venden en el mercado local para el corte obligatorio y que es producido a partir de cultivos como el maíz, la soja y la caña de azúcar.
Más allá del monto establecido, las empresas festejaron que las autoridades pusieran un ojo sobre el sector, “aunque no sabemos cómo sigue la película, realmente hay mucha incertidumbre porque también cae el volumen de producción” debido a la menor demanda por la crisis económica, según contó a Bichos de Campo Patrick Adam, de la Cámara de Bioetanol de Maíz, el bio que se usa al 6% para cortar la nafta.
La relación había comenzado con un traspié cuando en la Ley Bases el gobierno de Javier Milei intentó imponer nuevas reglas de juego para el sector de biocombustibles, que resistió la embestida con apoyo de los gobernadores de las provincias productoras. Luego de aquellos meses de desconcierto, esas mismas provincias (Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos, Tucumán, Salta y Jujuy) consensuaron con los productores un nuevo proyecto de ley sectorial.
Esa iniciativa será presentada al Congreso en poco tiempo más y los productores esperan que vea la luz antes de fin de año.
En esta entrevista, Patrick Adam contó qué aspectos incluye esta nueva normativa:
“Es un proyecto que incluye pedidos del Poder Ejecutivo Nacional, que incluye la visión que tienen las provincias productoras, e incluye un aumento al corte (de la nafta con bioetanol), que hoy es de 12%, al 15% como base, más un mercado libre por encima de ese corte. También incluye la participación de empresas petroleras en el mercado, y se desregula el precio ya que el Estado no puede fijar un precio todos los meses”, enumeró el especialista.
De ese modo, “pasaríamos a un esquema más competitivo, con licitaciones públicas y transparentes por tramos, para que haya competencia entre los productores. Esa competencia fijará una precio”, indicó el referentes del bioetanol de maíz.
Según lo acordado por las provincias productoras, si se aprueba la ley el corte de las naftas con etanol podría superar el 15% ya que “la intención es converger con el Mercosur y llegar a cortes como tiene Brasil, donde es de hasta 30%, o Bolivia y Paraguay, que tienen el 25%”.
“No vemos por qué nosotros estamos condenados al 12% si tenemos cantidades de materia prima para transformar, agregarle valor y así evitar que la Argentina siga perdiendo divisas importando naftas caras y contaminantes”, agrego Adam. El bioetanol se produce tanto en los ingenios azucareros como a partir de maíz. Por ahora esos dos sectores se dividen el corte del 12% en dos partes iguales de 6 puntos.
Según detalló el representante de las empresas maíceras, en 2023 se importaron casi 1.000 millones de dólares en naftas que podrían ser reemplazadas por este renovable. Esa importación “es ridícula cuando eso se puede sustituir por producción local y que permite ahorrar esas divisas. Lo que sucede no tiene sentido económico, mucho menos pensando en la situación que atraviesa el país”, destacó.
Según Adam, con la nueva ley en vigencia en el sector esperan llegar al menos al corte promedio del Mercosur, que es 24%. “No es un sueño delirante. La intención es llegar a la situación de Brasil que mezcla al 30% obligatoriamente. Pero si uno quiere usar más bioetanol porque tiene conciencia ambiental o porque es más barato o por el motivo que sea se puede agregar más etanol a esa mezcla libremente”.
Con respecto al precio, indicó que la intención es que haya licitaciones en las que compitan los oferentes. En ese procedimiento se definiría un precio y las formas de pago, y así se eliminarían los cupos que distorsionan el funcionamiento de las empresas, al tiempo que se evitaría la posibilidad de posición dominante por parte de los compradores, entre los cuales talla fuerte la estatal YPF, que cuenta con el 65% del mercado interno de las naftas.
“Bienvenida la posibilidad de una nueva ley como la que se va a lograr, porque hay un amplísimo consenso en el sector público y privado alrededor de ello. Hubo largas reuniones al respecto y se han introducido muchos cambios que pidió el Ejecutivo Nacional. Las provincias han trabajado muy bien, han creado una liga Bioenergética que se ocupó del tema, y han desarrollado un proyecto de ley junto al sector privado, que incluye todos estos cambios. Así que realmente no le veo ninguna contra, y calculo que antes del fin de año vamos a tener una ley” indicó Adam.
Demasiado optimista el final del artículo. Enfrentar a los petroleros en el congreso no es poca cosa. Máxime que en esta nueva Administración que viene mimandolós a todos los petroleros y energéticos.