¿La culpa de la crisis de SanCor la tienen los altos salarios de sus trabajadores? Es algo que se escucha muy a menudo y lo que el propio Mauricio Macri deslizó en varias reuniones con empresarios de la industria. Ahora que comenzó a discutirse un nuevo convenio laboral para ese sector, Alberto Coronel, abogado especialista en Derecho de Trabajo y asesor de la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera (ATILRA), respondió esas críticas en una entrevista por Bichos de Campo en Canal Metro.
“Cuando hablamos de costo de mano de obra, no hablamos solo de salario, sino también de aportes y contribuciones. En el costo del producto industrial, la incidencia de la mano de obra del trabajador lechero se ubica en un promedio del 10% de acuerdo al producto, lo que es poco comparándolo con otras industrias. El 55 o 60% del costo de salida de fábrica del producto se lo lleva la materia prima”, enunció Coronel, aludiendo a que los obreros no representan un costo significativo en el producto.
Para poner ejemplos, Coronel indicó que “en un kilo de queso que cuesta $125 al público, la incidencia del costo de la mano de obra del trabajador lechero es de $5. En un litro de leche ultrapasteurizada que cuesta $25 al consumidor, el costo de la mano de obra es de 0,83 centavos. Es decir que no tenemos incidencia”, aseguró.
El asesor clave de Atilra añadió que, a pesar de lo que se diga, “nunca son los trabajadores los culpables de las crisis de las empresas”, aún cuando en el caso específico de la industria láctea los afiliados al gremio perciben un excelente nivel de remuneraciones, en relación a los promedios de la República Argentina. Un obrero de la industria láctea está en un promedio superior a los 40.000 pesos mensuales, y de acuerdo a la categoría puede incluso cobrar de 50.000 a 60.000 pesos.