El proceso de reordenamiento cambiario implementado por el ministro de Economía Luis Caputo promovió una reducción considerable de las “retenciones cambiarias”, lo que implica, al final del día, más “verdes” en los bolsillos de los empresarios agrícolas.
El valor del “maíz billete”, es decir, cuántos dólares reales quedan en la mano del productor al vender el cereal, mejoró de manera notable luego del proceso de reordenamiento cambiario para alcanzar el nivel más elevado del ciclo comercial 2022/23 del cereal.
Entre marzo y mediados de abril de este año el “maíz billete” se ubicó entre 130 y 140 u$s/tonelada considerando la cotización del dólar negociado en el mercado bursátil (MEP).
Pero posteriormente el precio del cereal en “billete verde” descendió de manera progresiva hasta llegar a perforar los 100 u$s/tonelada entre fines de junio y comienzos del presente mes de julio.
Con la introducción del régimen cambiario especial del “dólar maíz” el precio del “maíz billete” logró superar los 120 u$s/tonelada, una cifra que, si bien entonces parecía atractiva, ahora luce muy pobre frente a los 160 u$s/tonelada que es factible obtener en la actualidad.
La realidad es que podría tratarse de una “oferta” de corto plazo, dado que, por efecto de la aceleración inflacionaria, la competitividad del actual tipo de cambio oficial podría licuarse en cuestión de dos a tres meses, lo que implica que podría llegara a haber otro “salto” del dólar que tire para abajo el valor de los granos medidos en dólares físicos.
Para tener una perspectiva de lo que está sucediendo, vale tener en cuenta que 234 u$s/tonelada es el precio que están recibiendo actualmente los productores brasileños en el estado de San Pablo. Es decir: las distorsiones en el mercado argentino están muy lejos de haberse solucionado.
El último dato oficial disponible, correspondiente al 13 de diciembre, muestra que para entonces la demanda había comprado 28,1 millones de toneladas (de las cuales 3,53 millones tenían precio abierto) sobre una cosecha estimada de maíz comercial de 34,0 millones de toneladas.
El denominado “dólar bolsa” o “dólar MEP” se obtiene al comprar un bono argentino en pesos que posteriormente es transformado en otro bono similar en dólares. Se trata de una operación realizada dentro del mercado argentino
Cuenta regresiva: En apenas dos meses se licuaría por completo la actual competitividad cambiaria