Desde el 18 de octubre de este año la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la República Argentina (Atilra) se encuentra realizando medidas de fuerza en los puestos laborales de SanCor, la cooperativa insignia de la producción láctea de Argentina.
La medida de fuerza, que tiene forma de asambleas de los trabajadores, mantiene paralizadas las plantas de producción de la cooperativa, genera problemas logísticos con la materia prima, la leche, que tiene que ser remitida a otras fábricas, y el corolario que se dio en horas de ayer, cuando la empresa cooperativa anunció el cierre de una planta de producción de quesos en San Guillermo, Santa Fe.
A primera hora de la mañana de hoy, la cooperativa emitió un comunicado oficial, mostrando cierto hartazgo con la situación, y acusando al Atilra de no querer el bien de sus trabajadores asociados, sino que la medida se da en venganza por la extinción de un mecanismo de salvataje de la cooperativa que consistía en un fideicomiso de empresarios que buscaban invertir.
“La excusa esgrimida por el sindicato es la regularización de cuestiones salariales cuando, en realidad, es la no concreción del proyecto del Fideicomiso de Administración que el gremio impulsaba de la mano de empresarios, que no tenía ni la capacidad económica, ni de gestión, para un negocio de esta importancia, y en el cual el gremio aspiraba a participar en su dirección”, comienza diciendo el comunicado de la empresa sobre esta situación.
A su vez, la cooperativa recuerda: “De manera sistemática, durante todo el proceso de aprobación del Fideicomiso, el sindicato ejerció presión desmedida sobre SanCor, para forzar decisiones y acciones. Así lo hizo en diciembre de 2021, en enero de 2022, de octubre de 2022 a enero de 2023 y en marzo y abril de 2023. En cada una de esas oportunidades, realizó medidas de fuerza bajo la excusa salarial para avanzar sobre las legítimas decisiones de los cooperativistas”.
Además. SanCor afirma que lo que el sindicato no puede explicar, es porqué avalaba el plan de los empresarios interesados, “que dejaba de lado a cerca de 1.000 empleados del total de la plantilla laboral de SanCor”.
De esta forma, la cooperativa explicó la encerrona en la que según ellos se encuentran desde hace más de 40 días, cuando empezó la medida de fuerza que se hizo notoria cuando hubo que tirar 100 mil litros de leche: “SanCor hizo público y oficializó ante el Ministerio de Trabajo un plan para la regularización salarial. El sindicato no sólo no consideró la propuesta, que recupera rápidamente las diferencias existentes, sino que comunicó al personal que no había ninguna propuesta. Así y todo, la Cooperativa realizó las acciones de comunicación interna necesarias, reconociendo además, el compromiso de cada uno de los empleados para el sostenimiento y continuidad de la Cooperativa”.
Para reafirmar su posición, desde la dirigencia de la cooperativa anunciaron que la propuesta sigue abierta y a disposición de los empleados: “Sólo es necesario retomar la actividad para que haya producción, distribución y comercialización de productos. Hoy, la capacidad de pago de salarios por parte de la empresa se ve limitada, de manera creciente, como consecuencia de las medidas de fuerza gremiales”.
Haciendo hincapié en los trabajadores, Sancor aseguró que son los empleados quienes tendrán que evaluar, sin presiones y en total libertad de decisión y acción, si vuelven a trabajar o “esperar una solución que desde el sindicato no se exhibe y que no tiene plazos ni capacidad para pagar el sustento de los trabajadores”.
“Lo único que pueden esperar, en caso de no reanudar las actividades, será la cesación de la producción y que ya no haya trabajo. SanCor no atribuye responsabilidades a los trabajadores. Sabe bien de su necesidad y de las presiones que reciben”, subrayaron desde la cooperativa.
A tono con el cambio de era político y social, la cooperativa resume: “Nadie debe impedir la libertad de trabajar. Nadie debe presionar a los trabajadores a firmar reclamos o llevar adelante procesos que no quieren hacer. Existen pretensiones injustificadas sobre la legítima propiedad de la empresa cooperativa y sus bienes, y eso de ninguna manera puede ser aceptado. Vivimos tiempos de cambios. Y nadie puede forzar a cambiar lo que uno desea, sueña, proyecta y hace en libertad”.
ATILRA DEJANOS TRABAJAR
BASTA DE BLOQUEOS
solo importa su plata y ver quien la tiene más larga
QUEREMOS TRABAJAR
SALGAMOS A LABURAR GENTE QUE PASA CON LOS EMPLEADOS
BASTA DE MIEDO
LOS Q ESTAN BLOQUEANDO ENTIENDE Q SI NO TRABAJAMOS NO COBRAMOS ?? QUE LA EMPRESA SE MUERE??
TANTO MIEDO GENTE TIENEN EL SINDICATO SE VA A ABRIR DE PATAS Y VAMOS A QUEDAR TODOS SIN LABURO ELLOS PELEAN POR LA SUYA NADA MAS
Bien dicho Martin. Se quedan sin laburo y la patota sindical sigue manoteando los dineros de los afiliados
Jaja viva la libertad de expresión, anda a decir en voz alta que queres trabajar , te mandan en casa los del gremio de jornada libre.
Quiero ver ahora en diciembre como van a pagar las cuenta y darle de comer a sus familia
Que le va a calentar a la dirigencia del gremio si ellos cobran igual
La pelea no es por los empleados, es x la deuda que tiene con la obra social del gremio
Ya que el acuerdo de la forma de pago la habían negociado entre las partes
Calcula como sera la libertad de expresión que la sra de un empleado fue fiscal de mesa de milei y al marido lo hicieron suspender
En el nombre del sr Jesús estos demonios serán expulsados quedan unos días y los empleados de sancor volverán a trabajar tranquilos. Gracias Sr Jesús