El desastre productivo presente en la Argentina es solamente una parte de la “película”, porque el otro gran dato –que no siempre es tenido en cuenta– es que este año la cosecha de granos gruesos viene atrasadísima.
Eso implica que no sólo está ingresando mucho menos de lo esperado, sino también bastante más tarde, lo que implica un problema tanto para las empresas agrícolas como para la cadena comerciales y, por supuesto, también para la economía argentina que depende las divisas generadas por el agro.
En lo que respecta a la soja, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires informó este jueves que el avance nacional de la cosecha cubre el 36,4% de la superficie con un rendimiento medio nacional de 15,8 qq/ha.
Si bien empiezan a cobrar fluidez las labores de recolección sobre el norte del área agrícola y en lotes de segunda, la demora interanual a nivel nacional es de 18,3 puntos respecto del promedio histórico.
En cuanto a la cosecha de maíz con destino grano comercial, los datos de rendimientos provenientes de Córdoba son menores a los esperados, lo que podría comprometer la proyección de cosecha a nivel nacional que, por el momento, se mantiene en 36 millones de toneladas.
A la fecha el avance nacional de la recolección del cereal se ubica en 19,7% del área apta con un rinde medio nacional de 45 qq/ha. Tal como sucede en el caso de la soja, el nivel actual de cosecha se encuentra muy lejos del promedio.
El único que dio la nota fue el girasol, que –tal como adelantó a fines de julio de 2022 Bichos de Campo– finalmente terminó siendo el cultivo “estrella” de la campaña.
En total, se recolectaron 3,9 millones de toneladas de girasol con un rendimiento promedio nacional de 19,9 qq/ha, una cifra bastante aceptable en función del desastre ocurrido con el resto de los cultivos.
https://twitter.com/camilaeciolaza/status/1653944527709782021
Yo voy a tener menos del 10 por 100 de cosecha y mala calidad nada de nadaa