Comenzó la Semana Nacional del Bonarda, que aunque sorprenda es el segundo varietal tinto más implantado en la Argentina, detrás del Malbec y por sobre el Cabernet, con 18 mil hectáreas.
Durante esta semana están previstas 27 actividades que se realizarán no solo en Mendoza sino también en las diferentes provincias vitivinícolas y en CABA. Por ejemplo, se presentará el jueves el libro “Bonarda: historia de un gran vino”, del enólogo Roberto González, apodado “El Señor Bonarda”, por sus conocimientos de este varietal.
Para la ocasión, el Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV) publicó un informe especial sobre la variedad, que “llega a nuestro país a través de las corrientes inmigratorias de fines del siglo XIX, iniciándose su cultivo en la región de Cuyo”. Las plantas de Bonarda, describe el trabajo, “son fácilmente identificable en el viñedo por sus hojas típicamente planchadas, muchas de
ellas enteras; brotes fuertemente coloreados y racimos medianos, compactos con características bayas redondas”.
¿Por qué está tan difundida? La respuesta es que “esta variedad ha sido utilizada durante mucho tiempo en nuestro país como base de vinos tintos comunes por sus altos rendimientos por hectárea y su sobresaliente aporte de color. Tiene gran aptitud para mejorar vinos de corte, especialmente con
Malbec”.
Más datos lindos: Las uvas Bonarda está presente en 13 de las 18 provincias vitivinícolas de Argentina, en el año 2021 registró un total de 17.712 ha
cultivadas, lo cual representa el 8,4% del total de vid del país.
De todos modos, reconocer el INV, la tendencia indica que el total cultivado va disminuyendo desde 2014, sobre todo en Mendoza y San Juan. La primera provincia “tiene la mayor cantidad de Bonarda del país, alcanzando en 2021 las 14.823 ha (83,7%), seguida por San Juan con 2.117 ha (12%). El resto de las provincias solo cuentan con 772 ha (4,4%)”.
En 2021 la producción total en el país de la variedad fue de 2.136.757 quintales, lo cual representa el 9,6% de la cosecha total. Esta variedad ocupa el tercer puesto en el ranking de quintales cosechados, luego de Malbec y Cereza.