¿Cómo se explica que la Argentina obtenga sucesivas cosechas récord (ahora mismo se espera una de 145 millones de toneladas) y al mismo tiempo tenga los mayores registros de pobreza en su historia? Es una pregunta incómoda, ciertamente. Pero la sociedad necesita responderla si alguna vez quiere encontrar un sendero de desarrollo que sea provechoso para todos.
Bichos de Campo aprovechó días atrás la reunión de la Fundación FADA en Río Cuarto para hablar de este cortocircuito nacional con diferentes personalidades. En este caso entrevistamos al economista Matías Tombolini.
Mirá la entrevista completa con el economista:
“La pobreza es un lugar al que llegamos y la cosecha es una cosa puntual. El año pasado, por ejemplo, tuvimos la peor sequía de los últimos cincuenta años. La Argentina tiene que urgente generar condiciones para que año tras año consigamos cosechas récord, aunque con esta presión fiscal es difícil. Lo que está claro es que con el agro solo no alcanza. No se puede poner todos los huevos en la misma canasta”, reflexionó Tombolini.
En otro tramo de la conversación con Bichos de Campo, el economista lamentó que en Buenos Aires y en otras ciudades del país se vean cada vez “más gente en la calle en situación de extrema vulnerabilidad”. Evaluó: “Eso tiene que ver justamente con qué es no hemos podido construir las condiciones para generar un país que por lo menos tenga una inflación controlada”, dando cuenta de que la pobreza más extrema también se debe a que la tasa de inflación es más elevada en el rubro de los alimentos que en el índice general de precios.
“El que menos tiene es el que soporta una inflación mayor a los promedios”, enfatizó Tombolini, para quien esto “retroalimenta” la pobreza.