Para los habitantes del Cono Sur el mate cocido es sinónimo de cotidianeidad. Un sabor, para muchos, asociado a la infancia. A una merienda calentita en un campamento escolar. Pero del otro lado del mundo la cosa cambia bastante.
Eso porque la Cooperativa de Santo Pipó (Piporé), localizada en Misiones, abrió una oficina comercial en Nueva Delhi, India, con el propósito de posicionar al mate cocido como una bebida exótica y sofisticada con alto valor nutricional.
En el sitio promocional de la bebida diseñado para consumidores indios se destaca que la yerba mate “tiene un 90% más antioxidantes que el té verde” y cuenta con magnesio, hierro, vitaminas B6, C y tiamina, lo que contribuye “a fortalecer el sistema inmunológico”.
El paquete de 12 unidades de mate cocido puro se comercializa a 260 rupias, cifra equivalente a unos 340 pesos argentinos. El producto, claramente, está destinado a los cientos de millones de personas que integran la clase media y alta india, los cuales tienen la costumbre de beber litros y litros de infusiones diariamente.
“Somos la Cooperativa que más exporta yerba mate, con 600 toneladas mensuales que tienen como principal destino a los países árabes, y a partir de hoy también al mercado indio, lo que representa un proyecto con mucho futuro”, dijo Gerardo Vallejos, integrante de Piporé.
“Se hizo un estudio de mercado donde el mismo público eligió cómo quiere consumir la yerba mate; en base a eso, siempre siguiendo la línea de infusión en tazas, se desarrollaron sabores combinados de yerba y rosas, y lemongrass, y mate cocido solo, con un diseño de venta específico que ya tenemos bien avanzado”, añadió.
Es decir: si alguno se estaba imaginando un indio tomando mate en bombilla, desde ya que eso no va a suceder, porque –gracias a la influencia de la cultura británica– el consumo de té y hierbas se realiza fundamentalmente en tazas.
Para posicionar el producto crearon una marca propia (Kaá Yarí), la cual será pionera en intentar generar un cambio cultural en el mercado indio, dado que la meta es instalar el consumo cotidiano de una nueva infusión entre el público joven urbano de esa nación que, recordemos, tiene más de 1360 millones de habitantes.
La apertura del mercado de la India para yerba mate, lograda en marzo pasado, se inició con un proyecto que nació en el Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM) al que, además de Piporé, adhirieron las empresas Hreñuk, Pindó y La Cachuera.
Todo comenzó el 27 de febrero de 2020, cuando el gobernador de Misiones, Oscar Herrera Ahuad, pidió formalmente apoyo a la Cancillería argentina para habilitar el ingreso del producto a India.
Luego, en julio de 2020, en la I Reunión del Grupo de Trabajo Conjunto en Agricultura, la delegación india informó que había concluido exitosamente la evaluación de la documentación presentada por Senasa y el análisis de riesgo sanitario.
En octubre de 2020, el tema fue abordado nuevamente en el marco de la Tercera Reunión del Comité Comercial Conjunto de ambas naciones. Un mes más tarde, el ministro de Agricultura, Luis Basterra, recordó el pedido a su par indio Shri Narendra Singh Tomar, mientras que, en paralelo, equipos técnicos del Senasa y del INYM trabajaban en la documentación adicional requerida por las autoridades indias.
El 4 de enero de 2021, India publicó ante el Comité de Medidas Sanitarias y Fitosanitarias de la Organización Mundial de Comercio (OMC) la medida, para lo cual determinó un plazo de 60 días para habilitar el ingreso de la yerba mate argentina a su mercado.
Finalmente, el 17 de marzo de 2021, el gobierno de India publicó en la Gazzete (Boletín Oficial) que el acceso de Ilex paraguariensis (yerba mate) proveniente de Argentina se hacía efectivo después de haber establecido las condiciones sanitarias para su ingreso.