El mismo día en que se extendió el cepo a las exportaciones de carne vacuna, el gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, cenó con dirigentes rurales de su provincia en señal de que no estaba de acuerdo con esa decisión. Muchos otros mandatarios de provicnias ganaderas también trataron de despegarse del gobierno nacional y enviaron señales conciliadoras a sus productores. Pero hubo un gobernador que hizo todo lo contrario y se esmeró por que sus declaraciones de apoyo a la medida fueran escuchadas por todos: el de La Pampa, Sergio Ziliotto.
Ziliotto, en rigor, fue la única figura política relevante ques sumó hasta ahora su respaldo explícito a la extensión del corset a las exportaciones de carne hasta el 31 de octubre. Otros declaraciones a favor de la decisión del kirchnerismo ya eran previsibles: desde el flaso dirigente carnicero Alberto Williams, al ex presidente de la Federación Agraria, Eduardo Buzzi; desde el economista oficialista Hernán Letcher al vocero del agro K, Pedro Peretti.
Pero el apoyo del gobernador de La Pampa tiene otro pesos, pues su provincia es ganadera hasta el tuétano.
“Es una medida coyuntural, es transitoria, no podemos asemejarla al año 2008 cuando después por años se cerraban las exportaciones; no están cerradas, hay cupos que el Gobierno nacional está usando para que no siga aumentando la carne”, incidó el gobernador. Además señaló que “nadie pudo explicar todavía por qué la carne ha aumentado el doble de lo que aumentaron el resto de los productos de la canasta básica y sí lo sé, porque la solución es la del Plan Ganadero, de duplicar o triplicar la producción de carne“.
“Todos nos tenemos que hacer cargo. Yo sé los he dicho a todos los dirigentes del campo porque los recibí también personalmente antes de que ellos cortaran el dialogo con La Pampa”, remarcó para destacar: “tienen otra posición y la respeto, pero yo nunca voy a cortar el diálogo sabiendo qué es algo que tenemos que resolver entre todos. El campo tiene que hacerse cargo de que hoy la eficiencia de la extracción de carne no es la mejor”.
En las últimas horas, salió al cruce de su gobernador la Mesa de Enlace de entidades rurales de la provincia. En una carta dirigida directamente a Ziliotto, los dirigentes rurales le recordaron que no fueron ellos los que interrumpieron el diálogo y le recordaron que incluso el 28 de junio pasado estuvieron compartiendo un encuentro de trabajo donde inclsuo “expresamos la disposición de trabajar en la Mesa Agropecuaria Provincial”.
“Del mismo modo hemos participado de las dos reuniones de la Agencia I-COMEX La Pampa, realizadas el 24 de junio y 25 de agosto, aun con la paradoja de ser una agencia de fomento de las inversiones y exportaciones, mientras la exportación de carne vacuna está restringida”, agregadon con ironía.
La Pampa es una provincia donde la ganadería es una de las pocas fuentes de empleo que existen, además del sector público. Por eso los ruralistas machacaron con la idea de que su gobernador está equivocado al defender las restricciones a la exportación. También le discutieron que la medida vaya a provocar una baja de los precios de la carne al consumidor, como dicen en el gobierno.
“La restricción a las exportaciones puede generar de muy corto plazo una baja del precio de la hacienda no siempre trasladado al precio de consumidor, pero con consecuencias negativas innegables. Solo de manera sucinta es oportuno mencionar el desaliento a la inversión en ganadería y en la industria frigorífica, la ruptura de contratos de exportación, la disminución de la entrada de dólares, la pérdida de puestos de trabajo y la disminución del stock ganadero”, enumeraron lso dirigentes de las entidades agropecuarias.
“Este conjunto de efectos negativos, que no son coyunturales ni transitorios, terminan provocando un aumento de los precios de la hacienda por un problema estructural de disminución de oferta”, añadieron, remarcando que “un capítulo aparte es la limitación para exportar vacas conserva y manufactura. Esta categoría no integra el consumo de cortes provistos por carnicerías. Se está limitando el ingreso de los planteos de cría y simultáneamente se les reclama una mejora en el índice de procreo”, remarcaron.
En el mismo sentido, pero con mmucha más dureza, le respondió al gobernador el productor ganadero y ex presidente del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna (IPCVA), Ulises “Chito” Forte: “Como pampeano, me da vergüenza haber escuchado las barbaridades que dijo Ziliotto sobre ganadería. No sólo
desconoce el enorme impacto que tiene esta producción en nuestra provincia (y en todo el país) sino que, en su afán de quedar bien con el gobierno central, reproduce mentiras y frases imposibles de sostener”, evaluó.
“Si conociera un poco su provincia, debería saber el enorme impacto que tiene la pésima (y repetida) medida del gobierno para una producción tan central como la ganadería. Sólo alguien que no entiende nada de carne puede decir que el supuesto plan del gobierno va a servir para algo. De hecho, creo que es el único gobernador de provincia ganadera que expresa ese apoyo”, se quejó Forte, que además es un reconocido dirigente de la UCR en esa provincia.
Para el ex presidente del IPCVA y ex vicepresidente de la Federación Agraria, los impactos negativos del cepo exportador son ma´s que evidentes. “Somos productores agropecuarios, no tontos. Acá, de un plumazo, y reflotando una de las peores políticas kirchneristas, destruyeron la confianza interna y externa; destruyeron la ganadería a lo largo de toda la cadena, porque no sólo le pegan al productor grande; también a los pequeños, que no saben qué hacer con su vaca conserva… y lo invito a que vaya a hablar con los trabajadores de frigoríficos suspendidos o despedidos por esta supuesta política exitosa de su gobierno”.