Un documento del Departamento de Agricultura de EE.UU. (USDA), que analiza la evolución del sector de biocombustibles, indicó que el desabastecimiento de gasoil que registra la Argentina se exacerbó por la decisión oficial de reducir el uso interno de biocombustibles.
“La demanda interna de biodiésel argentino en 2022 se proyecta en 920 millones de litros, una cifra 84% superior a la de 2021 ya que el gobierno reaccionó ante la escasez actual de gasoil en el país aumentando la mezcla obligatorio del biocombustible de forma permanente y también transitoria”,
De todas maneras, el informe aclara que el uso de biodiésel en 2022, a pesar del aumento de corte instrumentado en junio pasado, no llegará a alcanzar los niveles prepandémicos porque, debido a la crisis económica presente en el país, el consumo de gasoil no logró regresar aun al volumen registrado en 2019.
“El país normalmente compra en el exterior del 20% al 30% de sus necesidades de gasoil, pero a principios de este año las importaciones fueron mucho más lentas de lo necesario, principalmente debido a los precios internacionales más altos del petróleo y al hecho de que los distribuidores locales de combustible perdieron dinero vendiendo a precios inferiores a su costo de importación”, explica el documento del USDA.
“Un factor adicional que exacerbó la escasez de gasoil fue la reducción del mandato oficial del corte con biodiésel del 10% al 5% establecido en la nueva normativa nacional sobre biocombustibles”, añade en referencia a la Ley 27.640 que reemplazo en 2021 a la Ley Nº 26.093 vigente desde 2006 que redujo del 10% al 5% el corte obligatorio de biodiésel con gasoil con la posibilidad de bajarla hasta un 3% en caso de que el gobierno lo considere necesario.
Sin embargo, luego de que a partir de marzo –con el inicio de la cosecha de granos gruesos– comenzase a registrarse un faltante constante de gasoil en el país, finalmente en junio el presidente Alberto Fernández autorizó un corte permanente (no ajustable) del 7,5% más otro temporario del 5% que expira a mediados del presente mes de agosto (a menos que sea renovado la semana que viene por otro periodo más).
“Los volúmenes y precios se negociarán libremente entre compradores y proveedores, que en este caso incluyeron, por primera vez, grandes plantas de exportación de biodiésel”, apunta el informe del USDA.
Sin embargo, a pesar del mayor uso interno de biodiésel en el segundo tramo de 2022, la escasez de gasoil sigue presente en el mercado argentino –por cuestionas tanto estructurales como coyunturales–, lo que promueve la necesidad de seguir importando el combustible.