Si bien el hecho de que EE.UU. no haya logrado este año una gran cosecha de soja par poder recomponer el stock interno de la oleaginosa representa un factor de corto plazo que contribuye a sostener los valores internacionales del poroto, un informe del USDA advierte que existen variables desfavorables en el horizonte.
La oficina del USDA en Pekín estimó que en el ciclo 2023/24 la importación de poroto de soja por parte de China se desacelerará para alcanzar una cifra de 98,5 millones de toneladas versus 101,0 millones en 2022/23.
“Las perspectivas de crecimiento económico de China se han debilitado en los últimos meses, lo que plantea un desafío para la demanda de productos oleaginosos, particularmente en los sectores porcinos y avícolas”, señala el documento.
Los datos negativos sobre las perspectivas económicas y sociales de la nación asiática se incrementaron en el último año. Un solo dato: en julio pasado se dejaron de publicar en China estadísticas oficiales sobre el desempleo juvenil; el último dato, correspondiente a junio, mostraba una preocupante cifra de 21,5% para el segmento de la población ubicado en un rango de 16 a 24 años de edad.
“Los hogares y las empresas chinas cuentan con un nivel de deuda sustancial, lo que lleva a una lenta recuperación tanto de la inversión como del consumo”, señala el informe.
En ese marco, a pesar de la caída de los valores internos de la harina de soja, el margen promedio de rentabilidad del sector porcino chino permanecería en terreno negativo a causa de precios de la carne que no logran cubrir los costos de producción.
El informe del USDA sostiene que el hecho de Brasil –principal vendedor de poroto a China– aún cuente con una oferta exportable considerable de soja 2022/23 puede llegar a moderar los precios de importación en el segundo tramo de este año.
“Esa situación puede verse exacerbada por la decisión de China de reanudar las subastas de soja provenientes de la reserva estatal destinadas a molienda”, advierte el informe del USDA. Al 15 de agosto el gobierno central chino había vendido a precio subsidiado 3,50 millones de toneladas de soja a fábricas aceiteras chinas.
El gobierno central chino, a través de empresas estatales, gestiona importaciones de soja para almacenarlas en grandes silos con el propósito de introducirlas al mercado interno, a través de subastas, a precios inferiores a los de mercado con el propósito de controlar la inflación en alimentos.
China's real estate crisis is happening in the "perfect storm" of the economic crisis.
The CCP has introduced a series of stimulus policies to save the real estate economy. According to Bloomberg, the CCP's actions will only increase China's GDP by about 0.1%-0.2%. pic.twitter.com/RE8H2sK2U2
— NFSC_HAGnews (@NFSC_HAGnews) September 9, 2023