El debate sobre el uso de agroquímicos tiene en Entre Ríos uno de los escenarios más calientes, especialmente desde que la Suprema Corte confirmó que queda terminantemente prohibido aplicar agroquímicos en un radio de 1.000 metros alrededor de todas las escuales rurales. En el distrito Quebracho, a solo 30 kilómetros de Paraná, el productor Adolfo Weber quedó en el medio del conflicto, pues tiene una escuelita en una de las esquinas de su lote de 70 hectáreas. Convencido de que todo se trata de un gran sinsentido, decidió redoblar la apuesta y ofreció ese campo a quien quiera manejarlo durante cinco años para demostrarle que la producción orgánica es rentable y más conveniente.
El campo de Weber tiene la escuela al lado, por lo que el chacarero deberá dejar toda la superficie libre de agroquímicos desde esta misma campaña 2018/19. “El primer amparo prohibía fumigar a 1.000 metros por vía terrestre alrededor de las escuelas y a 3.000 metros en avión. El segundo fallo determinó que no se puede hacer pulverizaciones de ningún tipo, a ninguna hora. O sea que en la provincia quedaron alrededor de 280.000 hectáreas en las que no se puede usar ningún equipo pulverizador”, detalló Weber en diálogo con Bichos de Campo.
Y agregó: “No puedo cultivar más mi campo de la manera que lo venía haciendo. Si hay ecologistas o el que sea que quiera producir demostrando cómo se hace agricultura orgánica, yo lo ofrezco por cinco años. Si esta producción es viable y es buena, yo también quiero hacerla”.
Escuchá la conversación completa de Weber con Bichos de Campo.
La superficie afectada por la nueva normativa provincial equivale aproximadamente a toda el área triguera de Entre Ríos. El fallo generó una fuerte resistencia y movilizaciones entre los productores. “Hace diez años que vienen diciendo que el campo mata, con mucha retórica pero pocas comprobaciones. Los campesinos nunca nos metimos en esa discusión porque no estamos preparados, es el Estado el que debería meterse. Pero ahora nos desayunamos que tenemos esta Ley y estamos complicadísimos”, dijo Weber, uno de los pioneros del sistema de labranza cero o siembra directa en la provincia.
Desde su perspectiva, para que en la Argentina haya un mercado de orgánicos como en Estados Unidos, la producción debería valer el triple. “Pero acá el Gobierno lo único que hace es sacarle dinero al campo”, remarcó.
“Yo soy un ecologista de alma, yo quisiera todo el tiempo mejorar lo que estamos haciendo, pero no se puede desde un fallo judicial que prohibe de un día para el otro”, lanzó Weber.
El área que ofrece el productor es de unas 70 hectáreas y ya aparecieron algunos agrónomos interesados en asesorarlo para que dé el paso hacia otro paradigma, pero hasta ahora no lograron seducirlo.
Buscalo a jairo rastrepo…el te lo soluciona al toque
Vivaracho el paisano. Usted ofrece el campo por 5 años, tiempo que suele tomar un lote drogadicto para regenerar suelo y vida y empezar a producir orgánicamente. Usted dice que “de un día para otro” supo lo que todo el que quiere saber, sabe hace años