La Bolsa de Cereales de Bahía Blanca determinó este martes, en base a diferentes estudios climáticos, cual es la incidencia de la superficie anegada en el área de influencia del Puerto de Bahía Blanca, que a la vez implica un buen número de partidos afectados por los excesos hídricos que ya venían de arrastre y que volvieron a recibir lluvias abundantes este fin de semana.
Del análisis de imágenes satelitales MODIS NDVI (MOD13Q1), correspondiente a 29 partidos de la provincia de Buenos Aires y 14 departamentos de La Pampa, se puede construir un penoso ránking de los distritos más afectados. En algunos casos, como en Bolívar, la superficie de los partidos que está anegada llega al 66%.
En la Provincia de Buenos Aires, y solo contabilizando 29 partidos, hay una superficie afectada por el exceso de agua que llega a 5,5 millones de hectáreas, equivalente al 44% del área total ocupada por dichos partidos.
En La Pampa, las proporciones afectadas por los anegamientos son inferiores, y representan 11% del total, pero aún así se suman unas 639 mil hectáreas productivas que están afectadas por el fenómeno.
La Bolsa de Cereales de Bahía Blanca evaluó que “esta situación puede complicar aún más el normal desarrollo de los cereales de fina implantados (trigo – cebada). El exceso de humedad junto a temperaturas elevadas, han favorecido actualmente al desarrollo de enfermedades, situación que pudo observarse en las recorridas realizadas por técnicos de la institución”.
Por otro lado, de seguir con los problemas de anegamiento, la imposibilidad de transitar por los caminos rurales complicará la posibilidad de fertilizar los cultivos en tiempo y forma para lograr los estándares de calidad deseados por la industria”, advirtió la entidad.
De cara a las nuevas siembras, la Bolsa recordó que “se lleva en la zona tres años de precipitaciones superiores a los promedios históricos, situación que ha provocado el aumento del nivel de las napas freáticas”. Y avisó: “Si los perfiles continúan saturados, la falta de piso y los caminos anegados, también podrían influir negativamente en la siembra de los cultivos de cosecha gruesa de la próxima campaña”.