La principal “máquina” generadora de divisas de la economía argentina hace ya tres años que opera muy por debajo de su potencial y condiciona el crecimiento tanto del sector agroindustrial como del país en su conjunto.
Este lunes la Bolsa de Cereales de Buenos Aires proyectó una cosecha agrícola argentina de 128,9 millones de toneladas para la campaña 2024/25, apenas un 2% por encima del ciclo anterior, pero un 8% por debajo del récord de 140 millones logrado en 2018/19.
“La soja ganaría protagonismo con un aumento del área sembrada de 17,3 a 18,6 millones de hectáreas, capitalizando la caída del maíz, que perdería alrededor de 1,6 M/ha tras los daños causados por la chicharrita en la campaña anterior”, señala el informe de la Bolsa de Cereales.
“Sin embargo, las limitaciones en la inversión tecnológica, derivadas de los bajos precios internacionales y la persistente carga impositiva, restringen el alcance de los rindes potenciales. Como resultado, se espera que la producción de soja apenas crezca de 50,2 a 50,8 millones de toneladas, lejos del récord de 60,8 millones alcanzado en la campaña 2014/15”, advierte.
El girasol y el sorgo registrarían importantes incrementos en su producción respecto al ciclo anterior, con subas estimadas del 14% y 10%, respectivamente. Ambos productos, además, han registrado subas de precios en los últimos meses. De todas maneras, se trata de producciones poco relevantes considerando la “torta” global del negocio.
La Bolsa de Cereales de Buenos Aires estima que el sector agrícola generaría 30.568 millones de dólares en exportaciones en la campaña 2024/25, apenas 292 millones más que el ciclo previo,
“Aunque en el último año se implementaron algunas políticas y reformas con impactos positivos, la continuidad de impuestos como los derechos de exportación sigue siendo un desafío para la competitividad del sector, limitando su capacidad de crecimiento”, explica el informe.
“Al analizar las cantidades exportadas ajustadas a precios constantes de 2015, se observa que el nivel de las exportaciones se encuentra estancado, mientras que los incrementos recientes responden principalmente a variaciones en los precios internacionales”, indica en referencia al ciclo alcista de precios de los commodities agrícolas ocurrido entre 2022/21 y 2021/22.
En términos de recaudación fiscal a través de derechos de exportación (“retenciones”), se proyecta que el sector agrícola generaría 7370 millones durante el ciclo 2024/25, lo que representa un incremento del 2% en comparación con el ciclo previo. Si tales recursos quedasen en poder de las empresas agrícolas, es obvio que la inversión productiva y tecnológico en el sector agrícola crecería de manera explosiva. Pero no es el caso.
Son estimaciones, suposiciones, opiniones, calculos, probabilidades, puede ser o no
Se demora la eliminación del derecho de exportación, con lo cual debería crecer la inversión productiva agropecuaria nacional.