Si la salida es colectiva, sin dudas la Empresa Pública de Alimentos (EPA) busca demostrarlo con su primera planta local de fraccionamiento, inaugurada este año en las inmediaciones de Rosario. En sus 1200 metros cuadrados de dimensión, aquel lugar cristaliza un concepto que esa corporación de la economía social impulsa desde hace diez años: que lo público no necesita de lo estatal para funcionar, y que la sociedad civil puede llegar lejos si se lo propone.
“Demostramos que es posible ofrecer alimentos sanos, cooperativos y a precio justo sin ser gobierno, al materializar proyectos que muestran un modo de producir distinto, sustentable y autosuficiente en el tiempo”, definió la gerente comercial de EPA, Damaris Pachiotti, en conversación con Bichos de Campo. El eslogan es “sin nos organizamos, comemos todos”.
Nacida como una política integral alimentaria, EPA fue diseñada en el marco de la Fundación Ciudad Sin Miedo con apoyo de su presidente Juan Monteverde, quien además se desempeña como concejal de Rosario.
Así, durante la última década este movimiento se sustentó en la experiencia de distintos proyectos productivos de comercialización, entre los que se destacan el tambo La Resistencia, el último que persiste en Rosario y que lograr agregar valor en origen al elaborar quesos y dulce de leche; la Lactería, proyecto que se desprende del anterior y suma el apoyo de COTAR (la Sociedad Cooperativa de Tamberos de Rosario); y la plataforma Misión Antiinflación, que propone un consumo colaborativo impulsando ahorros de entre un 20% y 30% en la compra de alimentos.
“La planta de fraccionamiento viene a subir una escala en estos proyectos cooperativos. Estamos pensando en ella desde la pandemia, porque veníamos que el mercado y el Estado no estaban pudiendo dar respuestas eficientes a la hora de resolver y garantizar el derecho a la alimentación como derecho humano. Por eso defendemos que lo público no sea solo estatal, porque existe la gestión social para atender esta deuda histórica de nuestro país”, señaló Pachiotti.
Fue así que en el mes de julio lanzaron al mercado su primer producto insignia a través de un acuerdo con sindicatos, organizaciones y cooperativas de Santa Fe. En particular, la alianza estratégica realizada con la Federación de Cooperativas Federadas (FECOFE), que agrupa más de 60 cooperativas de toda la Argentina, fue clave para armar la propuesta de una caja con 15 alimentos de la canasta básica a un valor de 17.500 pesos, lo que supone un ahorro del 40%.
Dentro de ella, los productos elaborados por EPA son legumbres como porotos, garbanzos, arvejas y lentejas; polenta, arroz y yerba. Mientras que la mayoría son producidos en las cercanías de Santa Fe, la yerba es provista por una cooperativa misionera perteneciente a FECOFE, y el arroz por productores entrerrianos.
“La planta compra a granel los productos directo del productor. Allí los selecciona, clasifica, limpia, fracciona y envasa con marca propia. Para eso contamos con máquinas clasificadoras y envasadoras, además de molinos para elaborar la harina de maíz. La capacidad industrial total ronda las 400 toneladas”, explicó la gerente.
En cuanto a los precios, los mismos son acordados con los productores: “Intentamos que el precio no sea solo uno accesible al consumidor, sino que también sea justo para el pequeño productor. Todo esto lo hacemos sin subsidios estatales y a lo que apuntamos, finalmente, es a resolver el hambre en la ciudad de Rosario”, sostuvo a Pachiotti continuación.
Aún así, los productos EPA sobrepasaron los límites provinciales y llegaron a mercados de Córdoba y Chaco. Además, esta semana anunciaron que sumarán como destino a la ciudad de La Plata, de la mano de la Cooperativa La Justa.
De cara al futuro, desde EPA apuntan a inaugurar una segunda planta industrial en la localidad de Pérez, donde sumarán una línea de producción específica de barras de cereales, elaboradas a partir de su propia harina de maíz y de legumbres.
El otro día con la app de pedidos ya, arme una lista con los productos mencionados en la supuesta. Y me lleve la sorpresa que la cuenta descontando el costo de envio y de servicio, me dio igual e incluso menor si lo comparo con Carrefour o DIA, no pude comprobar ese 40% de ahorro.