“Estamos en un momento de la campaña que empieza a ser clave. Las lluvias de las últimas semanas trajeron tranquilidad y permitieron comprar tiempo como para llegar a fines marzo con un buen llenado de granos”, dijo a Bichos de Campo Nicolás Udaquiola, de la consultora AZ Group.
Luego agregó: “El mercado con estas últimas lluvias está comprando bastante certeza. Quedamos bien encaminados productivamente, lejos de los máximos de producción que se estimaron, pero empezamos a pasar ya el peor momento de la campaña”.
Pero en cuanto al negocio, la situación es bien distinta ya que desde hace unos meses que los precios internacionales de los granos vienen en caída, lo que ajustó los márgenes de una campaña que ya tenía en la previa resultados muy chicos.
La baja en los precios internacionales es el mayor motivo del retraso en la comercialización agrícola. Más allá de las discusiones en torno al tipo de cambio que se toma para el pago a los productores, con los precios actuales los agricultores no quieren vender y por eso hay un enorme retraso en la comercialización de soja y maíz nuevos.
“Es la campaña más lenta comercial de los últimos años. Hay muy poca soja vendida con precio por lo que vamos a un momento de cosecha en el que habrá necesidad de entrega para la cancelación de deudas y ahí tenemos un primer punto: n esos casos es mejor vender hoy que en los meses de cosecha cuando llegue toda la mercadería junta”, señaló Udaquiola.
A los productores no le gustan los precios actuales, no les resultan atractivos ni convenientes y por eso la demora en la venta. Pero peor es esperar, considera el analista.
Hay otra alternativa para los que no tengan urgencias comerciales o para el que pueda demorar la comercialización de al menos parte de la producción.
En post cosecha juegan otros factores en las decisiones comerciales: “Qué pasa con el mercado climático americano y en consecuencia con la volatilidad de los precios. Se puede evitar la venta en cosecha con herramientas financieras y financiamiento bancario en pesos, y sobre todo en dólares, que es lo que empieza a predominar más y lo que de alguna manera más nos gusta por lo menos para esta nueva realidad también de Argentina”.
El analista dijo que desde lo comercial “hay que replantear la campaña, y en consecuencia replantearse cómo tomar decisiones de financiamiento. Al parecer el negocio de tasas en pesos, por lo que tenemos hoy, corre un riesgo de quedar caro en dólares de forma significativa. Nos gusta, nos parece interesante y atractivo lo que es el financiamiento en dólares, con tasas que para el mundo son bajas, y para la historia argentina también son bajas a nivel bancario aunque todo depende del modelo de empresa”.
Escuchá la entrevista completa con Nicolás Udaquiola en Bichos de Campo Radio:
En tal sentido indicó que en el caso de las que trabajan al 100% en campo alquilado el resultado no alcanza para pagar la tasa de interés en cuestión, sirve para “comprar tiempo para tomar decisiones comerciales” pero no mejora la rentabilidad.
En tal sentido dijo que hay un primer escenario “destructivo” que se dará en caso de que Estados Unidos cumpla lo que estimó en términos de rindes récords y aumento de área de soja y maíz, lo que “traerá tranquilidad al mercado en términos de oferta y precios. Entonces en ese tiempo que compramos creo que de alguna manera nos pone sobre la mesa la necesidad de ser muy eficientes en todos los costos de la campaña, pero sobre todo también muy eficientes en cómo trabajar la gestión comercial de la nueva campaña. Hay que ser muy asertivos y teniendo muy claros cuáles son los precios objetivos a los cuales nos invita a tomar oportunidades”.
Esa compra de tiempo puede dar lugar a momentos de mejoras en los precios ya que se combinarían dos cuestiones: una perspectiva de Niña en Argentina lo que afectaría la oferta local y mundial y también que los fondos están sobrevendidos.
“Hoy fondos de especulación están vendidos en niveles muy altos y por eso quizás haya una oportunidad de que suba el precio”.