Por Nicolás Razzetti.-
Hace pocos días la Subsecretaría de Control Comercial Agropecuario (Succa) publicó una norma que elevaba la caución que se debe conformar cuando se faena hacienda con menos de 300 kilos. Luego de muchísimos años sin siquiera hablar del peso mínimo de faena, esa suerte de garantía se actualizó de $500 a $10 mil. El argumento fue que el valor original guardaba correspondiencia con el precio que tenía un ternero gordo cuando entró en vigencia la medida, en 2007, y que era necesaria adecuarlo al valor que tiene actualmente un animal de esa categoría.
La norma establecía que quienes recibieran hacienda para faenar con menos de 300 kilos debían conformar esa caución, aunque había una contemplación o desvío que alcanzaba al 10% de la tropa.
Ahora Marcelo Rossi, a cargo de esa Subsecretaria, señaló que están por publicar otra norma en la cual dan marcha atrás con el aumento. Para justificar el retroceso explicó que la situación climática obliga a muchos productores a desprenderse de forma obligada de hacienda que no alcanza el peso exigido. La caución entonces volverá a ser de $500 hasta que pase la crisis climática.
Superado ese momento, se volverá a aumentar el monto pero no a $10.116, sino a un valor en torno a los $2.000. Esa norma entrará a regir cuando los frigoríficos deban implementar los controladores fiscales (cajas negras y cámaras de seguridad de la faena). De algún modo, esto implicará el regreso de los controles efectivos contra el peso mínimo de faena. Para ese momento, quienes faenen bovinos con menos de 300 kilos y no conformen la caución, sí recibirán una multa en torno a los $10.000 por cabeza.