“La compañía argentina de salud animal Biogénesis Bagó prevé alcanzar los 300 millones de dólares de facturación (en torno a los 282 millones de euros) en 2027 y entrar en el top 20 del sector”.
Así comienza una inusual nota de la agencia española EFEagro , firmada por la periodista Laura Cristóbal. Inusual porque no es común que un medio europeo dedique espacio a una empresa argentina. Pero la entrevista al CEO de Biogénesis Bagó, Esteban Turic, constituye una interesante prueba de la vocación internacionalista de esa compañía, que pretende ubicarse entre los veinte grupos de medicina veterinaria que más facturan en el mundo.
En la entrevista, el propio Turic blanquea esa vocación expansionista: Según el ejecutivo, la firma ha logrado ser “competitivos a nivel industrial, con productos que nos permiten expandirnos geográficamente (especialmente las vacunas contra la fiebre aftosa y la rabia) y un soporte técnico experto en área de reproducción; somos una empresa muy fuerte, muy competitiva; buena en identificar necesidades y responder a ellas y no fallar“.
Se agrandó Chacarita.
Lo cierto es que la pretensión de facturar unos 300 millones de dólares dentro de cuatro años implicaría un incremento del 35% respecto a los 222 millones facturados en 2022. En cuestiones de ránking, ese salto implicaría un avance desde la posición 25 que ocupa actualmente en el sector de la veterinaria mundial, que supera los 39.000 millones de dólares de facturación en conjunto.
En la entrevista con Efeagro a Turic, este doctor en Veterinaria y máster en Bacteriología detalló que en los últimos tres años esta empresa creció a tazón de 14% anual en los negocios de la vacuna contra la fiebre aftosa y la rabia, mientras que el promedio del mercado fue de 3,1%.
“Biogénesis Bagó -que nace de una fusión en 2006 entre Bagó y el Grupo Insud (Biogénesis)- tiene una capacidad productiva de 450 millones de dosis de vacunas y 3 millones de unidades de productos farmacéuticos, con dos plantas en Argentina (Garín y Monte Grande) y presencia en 47 países de América, Europa, Asia, Oriente Medio y norte de África”, destaca la nota publicada en España.
¿Y por qué el interés de la compañía argentina por mostrar sus números en aquel país? Porque en 2022 el grupo adquirió la línea de negocio hormonal para reproducción animal de la española Hipra. “Fue como nuestro desembarco en Europa; nos permite estar más en contacto con laboratorios con los que poder establecer nuevos negocios y estudiar la posibilidad de aumentar nuestro portafolio en Europa”, explicó su CEO.
Por ahora, según los números revelados por el empresario, el 75% de la facturación se produce en América Latina, el 15% en Asia, el 5% en Estados Unidos y el resto entre Europa, Oriente Medio y norte de África. Por otro lado, el 70% de la facturación proviene del segmento de las vacunas y el 30% del resto de productos.
Hay que recordar que la gran llave para esta expansión de Biogénesis Bagó fue que en las últimas tres décadas fue prácticamente la única abastecedora de las vacunas contra la fiebre aftosa en la Argentina, donde cada año se deben aplicar unas 100 millones de dosis. Además en el país Biogénesis Bagó mantiene el banco estratégico de vacunas, para hacer frente a un eventual rebrote de esa enfermedad ganadera.
Biogénesis Bagó, en los últimos años, se ha expandido hacia China, Corea del Sur, Vietnam y Arabia Saudita de la mano fundamentalmente de su vacuna para la fiebre aftosa. Pero además de estas vacunas, la empresa argentina ofrece productos hormonales reproductivos, antiparasitarios y suplementos minerales.
“Una empresa que el 70% de lo que vende está destinado a prevenir enfermedades tiene un impacto directo en la salud de los animales y por tanto de las personas, ya que de esas enfermedades algunas de ellas pueden ser zoonóticas”, declaró el ejecutivo.
Debido el crecimiento del mercado destinado a las mascotas, Turic anticipó que en los próximos años este segmento del mercado crecerá mucho, hasta una previsión del 15% de sus ventas.