Este lunes, primer día de gobierno de Javier Milei, se registraron Declaraciones Juradas de Ventas Externas (DJVE) de maíz por una cifra colosal de 1,74 millones de toneladas.
A la fecha las registraciones de DJVE de maíz 2023/24 –es decir maíz que recién se está sembrando en estos días– acumula una cifra de 11,1 millones de toneladas.
Tal como advirtió en su momento Bichos de Campo, los pesos “queman” en la mayor parte de las manos de los argentinos y más si todo indica que viene en camino una gran devaluación.
En ese marco, sigue el “festival” de registraciones en la Secretaría de Agricultura de DJVE de maíz con el propósito de adelantar todo lo que se pueda el pago de derechos de exportación.
La mayor parte de las DJVE de maíz registradas en las últimas semanas –principalmente por Cofco, Viterra, Cargill, ADM y Amaggi– corresponde a la modalidad 360 (por 360 días de plazo para concretar el embarque luego de la registración), lo que conlleva la obligación de abonar derechos de exportación por adelantado.
Eso porque la resolución 78 del ex Ministerio de Agricultura, vigente desde octubre de 2019, determina que los exportadores de productos agroindustriales están obligados a abonar al menos el 90% del derecho de exportación correspondiente dentro de los cinco días hábiles desde la registración de las DJVE-360, lo que implica, en los hechos, que el impuesto debe pagarse por adelantado.
Eso significa que los derechos de exportación correspondientes a más de 11 millones de toneladas de la nueva campaña agrícola de maíz se abonaron con el tipo de cambio artificial que a la fecha se encuentra en 365,5 $/u$s, mientras que el valor del futuro de dólar para fines del presente mes de diciembre supera los 750 $/u$s. Y para enero próximo llega a los 880 $/u$s.
Como el adelanto del 90% del impuesto se abona con el tipo de cambio oficial, es mucho mejor negocio cancelarlo ahora que luego de la devaluación (o megadevaluación) del peso que viene en camino. Todos los que tienen pesos están urgidos por sacárselos de encima y las compañías exportadoras no son la excepción.
Con las sucesivas prórrogas de las DJVE de maíz instrumentadas por el gobierno kirchnerista, es factible que las compras de maíz realizadas en el ciclo comercial anterior puedan usarse en el siguiente, lo que implica, en términos netos, que los exportadores se encuentran “comprados” en el cereal y tienen margen para realizar declaraciones masivas de embarques.
Eso mismo, en cambio, no pueden hacerlo con soja o con trigo de la campaña 2023/24, dado que, además de no haber implementado la posibilidad de prorrogar plazos de DJVE en ambos granos, los niveles de ventas de los mismos por parte de los productores son bajísimos y, por lo tanto, los exportadores no pueden registrar embarques por mercadería que no saben si tendrán disponible.
En ese marco, este lunes por la tarde la Secretaría de Agricultura procedió a cerrar hasta nueva aviso el registro de DJVE para todos los productos agroindustriales, lo que implica que ya no podrán declararse más embarques de maíz (ni de cualquier otro producto).
La medida se toma a partir del sinceramiento cambiario que está en planes de instrumentar el equipo económico de Javier Milei, el cual es indispensable para poder reactivar las órdenes de venta de granos (hoy congeladas) que son la única fuente genuina de ingresos de divisas de la economía argentina.
999989_Circular 02-2023
A ver cuando habláis de él trigo y el gilarol