El lanzamiento entre varios ministerios de un conjunto de recomendaciones de políticas públicas para regular las aplicaciones de agroquímicos, basadas en las llamadas Buenas Prácticas Agrícolas (BPA), vienen a llenar un espacio vacío, según destacó el jefe de Gabinete del Ministerio de Agroindustria, Santiago del Solar, uno de los principales promotores de esta iniciativa.
“Partimos de una visión común de desarrollo sostenible, sabiendo que el modo de abordar este tema debía ser interdisciplinario; por eso es importante haber consensuado políticas con Salud, con Medio Ambiente y con Ciencia y Tecnología”, evaluó el funcionario.
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El documento que resultó del trabajo de técnicos de todas esas carteras nacionales, además del Senasa y del INTA, será ahora sometido a una consulta pública por espacio de un mes y luego se presentará en el Congreso de la Nación y a las provincias, a través del Consejo Federal de Medio Ambiente (Cofema), compuesto por los ministros de Ambiente de las provincias, y el Consejo Federal Agropecuario (CFA), integrado por los ministros de la Producción.
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Del Solar explicó a Bichos de Campo, que “buscamos que este material nos de pautas y principios para recomendaciones, porque en realidad quienes legislan y regulan son las provincias y no el Estado nacional, aunque también queremos que esto inspire a una ley nacional más adelante”, agregó.
“Lo que pretendemos es que quede clara la importancia de las Buenas Prácticas Agrícolas (BPA), que todas las regulaciones de fitosanitarios tengan base científica, y que haya un monitoreo. Es imprescindible la adaptación, ya que la tecnología vive evolucionando; por ende las regulaciones deben ir cambiando también”, aclaró Del Solar.
Con respecto a las prohibiciones vigentes en muchos distritos para aplicar agroquímicos, Del Solar indicó que “el tema no son las distancias sino el cómo se aplican los fitosanitarios y en qué momentos y condiciones. Por eso hacemos hincapié en las BPA y en los monitoreos. Y por supuesto, hay que tener muy presentes los controles más estrictos en las zonas buffer, tales como cercanías a poblados o ríos”.