Ya hemos contado en Bichos de Campo la situación que denuncia estar viviendo el grupo liderado por Guillermo Masoni, el empresario que le presta las oficinas nada menos que al ex presidente Mauricio Macri y que realiza aportes a la campaña de Patricia Bullrich. Dueño de 131 mil hectáreas de campos en el este de Santiago del Estero, los Masoni denunciaron que ya les usurparon 4.000 hectáreas. Sin reacción de las autoridades provinciales, ahora ingresó una cosechadora ajena en un lote de 1.000 hectáreas de trigo. Los intrusos -que ya no parecen simples campesinos- dicen que van a recolectarlo.
“Nos metieron una cosechadora en uno de los campos tomados donde tenemos sembrados 1000 hectáreas de trigo”, indicó a Bichos de Campo uno de los hijos del empresario, quien mientras todo esto sucede se mantiene fuera del país, porque en la justicia santiagueña se reactivó una vieja causa de 2013, en el que es Masoni quien es acusado de “usurpador” por un grupo de abogados que, según fuentes consultadas, respondería al gobernador Gerardo Zamora.
La foto que abre esta nota es la única prueba de que un equipo de cosecha ajeno a la empresa Masoni se dispone a recolectar el trigo sembrado en un campo llamado “El Puma”, que pertenecería a los empresarios desde mucho tiempo antes a que se iniciara este conflicto por tierras en Santiago.
“La gente de ahí no se anima a acercarse más, están muy amenazados. (Los intrusos) fueron a la comisaría y dijeron que iban a cosechar el trigo. Que se iban a quedar con el 18% para gastos y que el resto lo iban a guardar hasta que el juez diga de quién es” la propiedad, indicaron los afectados. El lote sembrado con trigo está ubicado a pocos kilómetros de la localidad de Los Juries, donde el grupo Masoni comenzó a adquirir propiedades a partir de los años 40, hasta acumular la friolera de 131 mil hectáreas.
Los actuales problemas denunciados por Masoni -que había firmado un acuerdo con la ex gobernadora y esposa de Zamora en 2015 para resolver distintos conflictos con los pobladores-, comenzaron luego de que a fines de 2021 el empresario decidió poner a la venta varios de los campos y reclamó a la Dirección de Catastro provincial los respectivos títulos de propiedad para poder hacerlo.
A partir de allí, un juez de transición (que los testimonios recogidos por Bichos de Campo también ubican cerca del poder político local) llamado Darío “Lalo” Alarcón habría activado una causa abierta en 2013, en la que un grupo de abogados santiagueños liderado por Carlos Weyembergh acusa a los Masoni de conformar una “asociación ilícita” para apoderarse de las tierras expulsando a los pobladores originales. El expediente no pudo ser visto todavía por los acusados, e incluso el abogado de Masoni, llamado Rodrigo Posse, fue detenido por algunas horas. Posse fue uno de los fundadores del PRO en la provincia, y llegó a ser diputado provincial por el macrismo.
Masoni, cuyo negocio principal es ser desarrollador inmobiliario, denunció ya que han recrudecido las tomas por parte de activistas del Mocase (Movimiento Campesino de Santiago del Estero) de unas 4.000 hectáreas en varios establecimientos. En ningún momento el empresario oculta sus simpatías por el ex presidente y por Bullrich, de quien se presenta como principal aportante de fondos para la campaña. Tanta es su ligazón que es quien le presta a Macri sus actuales oficinas, ubicadas sobre Avenida Libertador, en Olivos.