Fernando García Frugoni es un destacado asesor en materia de cultivos extensivos. Trabajó durante muchos años en Aacrea y hoy se desempeña como responsable del negocio de microorganismos en la nueva compañía Indigo, mientras sigue ocupándose de la consultoría privada en un proyecto propio que se llama A-Fox Agribusiness.
Recibido de ingeniero agrónomo en la UBA hace casi 20 años, su desarrollo profesional se dio en paralelo con el ‘boom’ de los agronegocios en la Argentina. Siembra directa, soja transgénica y uso del glifosato fueron los tres pilares que sostuvieron dicho desarrollo. El resultado fue que se duplicó la producción de commodities agrícolas en menos de una década.
“El glifosato es una herramienta de amplio espectro, un jugador muy versátil. Como la aspirina o el ibuprofeno de los medicamentos. Terminó siendo muy disruptivo a pesar de ser una tecnología muy vieja, porque tuvo gran sinergia con la soja transgénica (resistente justamente a ese herbicida). Un paquete muy barato que hizo que este tipo de agricultura creciera de forma exponencial en el país”, mencionó García Frugoni a Bichos de Campo.
Aquí la entrevista completa con el asesor agrícola:
“Esto hizo que se expandieran mucho las fronteras. Fue notable la generación de riqueza para los pueblos del interior y para el país”, señaló García Frugoni, aclarando que gran parte de la renta lograda por esa oleada de productividad se trasladó al resto de la sociedad mediante el cobro de las retenciones.
El agrónomo piensa que la declinación de este extraordinario jugador comenzó en la campaña 2008/09, luego del conflicto entre campo y Gobierno por las retenciones móviles. Los dolores de cabeza también por entonces fueron visibles en los lotes agrícolas. “Además de enfrentar una seca monstruosa, empezó a notarse fuerte el tema de las malezas resistentes”, recordó.
“A partir de ahí, una tecnología que parecía mágica -glifosato- ya empezó a dejar de serlo; al payaso se le empezó a correr el maquillaje”, ironizó. “Seguía siendo barata pero ya dejaba de ser confiable”, añadió Fernando.
-¿Entonces el glifosato perdió terreno debido a la aparición de malezas resistentes y no tanto debido a la presión ambientalista?– preguntó Bichos de Campo.
-Claramente, fue una cuestión biológica de las malezas que empezaron a quebrar su efecto. El tema de las discusiones ambientales, yo creo que son más ideológicas hacia este producto que otra cosa, porque es bastante poco riesgoso o mucho menos que otros.
-¿Habrá un reemplazante para el glifosato?
-Bueno, no creo que aparezca algo parecido. Ahora vamos a tener que trabajar más en equipo, sin este flaco que hace goles y te salva el partido. Y eso quiere decir utilizar varios herbicidas, rotarlos y hasta realizar prácticas biológicas (cultivos de servicio y productos biológicos), más cambiar cuestiones de manejo, como fecha de siembra por ejemplo.
García Frugoni utilizó la metáfora de Maradona, que cierto día tuvo que dejar las canchas y dejó de hacer maravillas, salvo que en este caso no ha aparecido (ni aparecerá) un Messi que no nos haga extrañarlo tanto.
“Es un momento apasionante que nos obliga a comprender y entender los nuevos y múltiples escenarios”, agregó García Frugoni.
-Ahora que el equipo debe jugar distinto… ¿Tenemos buenos directores técnicos para esto? ¿Están preparados los ingenieros agrónomos?
-Y bueno, a fuerza de golpes nos hemos ido entrenando. Yo considero que la evolución en materia de conocimiento de los últimos diez años fue notable. Todos hablamos de cosas nuevas, como los cultivos de servicio o la aplicación selectiva sobre malezas, en poco tiempo. Y no solo nosotros los agrónomos debemos cambiar la cabeza, sino todos los actores productivos. Ahora se valora que el operario de las máquinas sea consciente de lo que hace, tenga capacidad de ver y asumir errores o alertar situaciones. Antes solo se le pagaba por las hectáreas que trabajaba cada día.
Lo que pasa querido colega que la sociedad.quiere que no sea riesgoso ni el glifosato ni ningun otro que sea mas riesgoso porque no tiene porque sufrir riesgo para aumentar las ganancias de los productores y fabricantes de Agroquimicos , transgenicos y vendedores de estos productos amen de honorarios profesionales.
Como el tema de la Pandemia que nos azota, la salud esta primero y mucho mas que se ve afectada para mayores ganancias de terceros
Como los fabricantes de herbicidas y transgenicos a parte de los productores. que afectan la salud de propios y ajenos a altos costos de produccion que en un balace salen hechos habiendo producido el daño ambiental a los habitantes de este pais.