La seca, la campaña y los anuncios de Mauricio Macri para el agro. De todo eso le preguntamos los Bichos de Campo a Raúl Dente, asesor de la Federación de Centros de Acopiadores de Cereales. “Más allá de que son positivos los anuncios, el resumen de todos los registros en uno solo es una tarea que no se puede hacer de la noche a la mañana. A nosotros nos preocupa principalmente el Registro Fiscal de Operadores de Granos, el cual es muy difícil de ser eliminado, porque es el que se toma de base para la deevolución de retenciones (de IVA), y eso tiene implicancias fiscales importantes”, comentó Dente.
Entonces, ¿Esto que se anunció qué es? ¿Es desburocratizar como dice Macri? ¿O las exigencias impuestas al productor serán las mismas, con la diferencia de que las cumplirá todas de una vez?
Dente sostuvo que donde hubo un avance sustancial por ahora fue con el Registro Único de Operadores de la Cadena Agroindustrial (RUCA). “Ahí sí hubo una simplificación importante en lo que es la presentación de documentación. Y en la medida en que este gobierno elimine más trámites al productor, bienvenido será. La clave de estos procesos es que no sólo desburocraticen, sino que también sean eficaces en el control de la evasión”, remarcó Dente.
Escuchá el reportaje completo a Raúl Dente:
Con respecto a la decisión de algunos exportadores de no hacer más los análisis de calidad de los granos en los laboratorios de las cámaras arbitrales, sino en laboratorios propios, Dente sostuvo que “más allá de que la mercadería debe ser analizada, desde Acopiadores no aceptamos bajo ningún punto de vista que no exista la posibilidad de recurrir a un arbitro en caso de disconformidad, porque se trata de un principio elemental de derecho de defensa que no se le puede negar a nadie”.
Y agregó: “Siempre tiene que estar abierta la instancia de las cámaras para dirimir discrepancias”.
Otro de los temas polémicos sobre el que le preguntamos a Dente: los plazos de pago que luego de esos análisis imponen los exportadores o las grandes cerealeras a los productores. “Hicimos avances el año pasado, conviniendo, primero con la Federación Molinera y luego con la exportación, un plazo no mayor a los 30 días, si bien las normas dicen que se debe pagar a los 5 días de la presentación de las facturas. A veces se cumple, otras no tanto. Siempre recibimos sugerencias al respecto”.
Dente mencionó que “además, el año pasado logramos que se pagara el 100% del valor de las operaciones, para evitar que haya dos liquidaciones a fijar. Si la mercadería ya se entregó, si se sabe la calidad y la operación fue al contado y no hubo ninguna cláusula de pago diferido, en ese caso que se pague el 100% directamente. Estamos en un proceso complicado con muchas derivaciones, y de adecuación a lo que debería ser una comercialización normal. Pero indefectiblemente hay que cumplir con las obligaciones de las transacciones en granos, para que esto no sea un viva la pepa y termine dominando el más fuerte”, avisó.