Gestionar la política económica de un país agroindustrial sin conocer un “pomo” sobre la dinámica de ese negocio no sale gratis. Y lo que está sucediendo en el mercado argentino de fertilizantes es un claro ejemplo de eso.
El pasado 28 de junio el ministro de Economía Luis Caputo dijo que próximamente el “impuesto PAIS”, que actualmente se encuentra en 17,5%, será rebajado al 7,5%. La noticia, si bien fue bien recibida –como toda rebaja de la presión tributaria– está generando distorsiones enormes .
“En la Argentina la demanda de fertilizantes se encuentra paralizada en todos los actores de la cadena. La perspectiva para los próximos meses no parece que vaya a modificarse hasta tanto no se efectivicen los anuncios por parte del gobierno de reducción de 10 puntos del impuesto PAIS”, señala el último informe de la consultora IF Ingeniería en Fertilizantes.
La reducción de 10 puntos del “impuesto PAIS” se calcula sobre los precios CFR de importación, lo que representa 37 u$s/tonelada para la urea y 63 u$s/tonelada para el MAP/DAP, es decir, una baja de 6% y 8%, respectivamente, sobre los precios mayoristas actuales.
“Por el lado del abastecimiento de cara a la campaña gruesa, los importadores tienen que tomar decisiones para que los fertilizantes lleguen a partir de la segunda quincena de agosto para poder abastecer la demanda interna. Entendiendo que la reducción del impuesto está anunciada para septiembre (no se sabe exactamente qué día del mes), este es un factor que complica el normal abastecimiento entendiendo el impacto que tiene en los costos de importación”, advierte el informe.
El problema es que tal dilema se presenta en el marco de un mercado internacional alcista para los fertilizantes fosfatados, lo que implica que cada semana que pasa sin poder operar el valor del producto se torna más caro.
“Argentina todavía tiene inventarios comprados para cultivos de fina, y precampaña de gruesa, los que pagaron 17,5% de impuesto PAIS. El impacto que esto pueda tener en los precios locales dependerá de las posiciones de cada empresa, pero sin dudas que el mayor impacto se verá en los fosfatados, ya que Argentina depende 100% de la importación”, apunta IF Ingeniería en Fertilizantes.
Por fortuna, los precios internacionales de la urea se estabilizaron debido a que India, gran importador del fertilizante, está mostrando una dinámica compradora muy baja en función de las expectativas de los países exportadores de nitrógeno.