El gobierno brasileño, frente al escenario climático desfavorable que está presentando en el comienzo del ciclo 2023/24, empezó a reforzar las partidas destinadas a ayudar a productores en eventual situación de emergencia.
Este martes los ministros de Agricultura y Ganadería, Carlos Fávaro, y de Desarrollo Agrario y Agricultura Familiar, Paulo Teixeira, junto con el presidente de la Agencia Brasileña de Promoción de Exportaciones e Inversiones (Apex Brasil), Jorge Viana, y el presidente de la Empresa Nacional de Abastecimiento (Conab), Edegar Pretto, evaluaron el panorama para comenzar a definir acciones proactivas.
Una de las medidas implementadas es el aumento del 50% de los subsidios destinados a financiar parte de la prima de los seguros agropecuarios, que pasaría de 1000 a 1500 millones de reales (de unos 200 a 300 millones de dólares).
“Hay que aclarar que hace algunos años los recursos para el subsidio del seguro rural se fijaron en alrededor de 1000 millones y hemos logrado una señal muy positiva con un aumento de 500 millones este año”, afirmó Fávaro por medio de un comunicado oficial.
El ministro además anunció que ya se tomaron medidas de emergencia para ampliar las líneas de financiamiento destinadas al sector ganadero brasileño.
Mientras que buena parte del sector norte y este de Brasil está atravesando una restricción hídrica en plena siembra de la soja 2023/24, el sur del país está experimentando temporales con excesos hídricos que complican las labores agrícolas.
El pronóstico de largo plazo elaborado por International Research Institute for Climate and Society (IRI), organismo dependiente de Columbia Climate School, prevé para el trimestre comprendido entre noviembre y enero próximo lluvias inferiores a las normales en el norte de la región agrícola brasileña.