Qué pregunta estúpida la del título. Claro que un equipo de primera puede tener un técnico de las divisiones inferiores. Pero lo más probable es que lo “llenen” de goles.
Eso es precisamente lo que está ocurriendo con el maíz argentino. Pasamos a jugar –por una cuestión meramente geográfica– en la principal liga mundial del cereal al estar en el mismo “barrio” que Brasil, que es, tal como se propuso dos décadas atrás, la nueva potencia agroindustrial.
EE.UU. reconoce que perdió el “campeonato mundial del maíz” con Brasil
Uruguay y Paraguay están en la misma situación y, si bien claramente no están a la altura de Brasil, pueden jugar en su misma división porque cuentan con un equipo técnico profesional que está preparado para afrontar las circunstancias.
Argentina, en cambio, es el hazmerreir del campeonato porque, a pesar del empuje que le ponen los jugadores, el equipo técnico no tiene el menor interés en el resultado: están demasiado ocupados en esquilmar lo que queda en el club; se llevarían las gradas si pudiesen hacerlo.
Brasil, en conjunto con sus vecinos, el Mercosur, podríamos decir, es ahora el nuevo gran oferente de productos agroindustriales a escala global y ese privilegio viene acompañado con la obligación de la competitividad: ofrecer cada vez más a un precio cada vez menor.
Algún despistado podrá mirar los precios en el CME Group (“Chicago”), compararlos con los presentes en el Matba Rofex y concluir que el mercado está “fallando”. Pero no es el caso. El mercado funciona bien, pero ahora el corazón de la matriz agroindustrial ya no está en EE.UU., sino en el Cono Sur. Los tiempos cambian.
Para el castigadísimo equipo maicero argentino es una pésima noticia, porque los valores FOB del cereal con origen en Rosario, por una cuestión logística –en el mejor de los casos– pasarán ahora a estar por debajo de los precios de originación presentes en los puertos brasileños.
Actualmente, un productor brasileño del estado sureño de San Pablo cobra unos 190 u$s/tonelada por el maíz disponible, mientras que uno argentino en la zona núcleo pampeana percibe alrededor de 95 u$s/tonelada (considerando el tipo de cambio “contado con liquidación”). Qué paliza. Tal vez, después de todo, los malvivientes que conforman el equipo técnico se hayan llevado también las gradas del estadio del club.
¿Cómo se ve la pésima actuación del equipo argentino en la escala de posiciones regional? Veamos.
¿Y cómo se visualiza la performance del equipo? ¿Tal mal anda? Veamos.
Pero a no deprimirse porque, detrás de tantas pálidas, es bueno saber que si los países vecinos pudieron tener un buen equipo técnico, Argentina también, algún día, podría también llegar a tenerlo. Tenemos a jugadores que son tan buenos como los presentes en el resto del Mercosur. Solamente falta sacarse de encima a los cleptómanos bulímicos que están arruinando al club.