Hoy se conoció un dato clave que, si bien se sabía “a ojo” hace tiempo, las estadísticas oficiales vienen ignorando hace décadas a pesar de que se trata de información sustancial para entender cómo funciona el negocio agropecuario argentino.
El dato en cuestión fue informado al pasar por el secretario de Agricultura, Jorge Solmi, durante una presentación realizada en la jornada en formato virtual Todo Maíz + Sorgo.
En la campaña 2020/21, según los registros del Sistema de Información Simplificado Agrícola (SISA), 45.168 empresas agrícolas sembraron 8,47 millones de hectáreas de maíz, de las cuales un 68,7% se hicieron en campo arrendado.
Otro dato llamativo es que un 30% de las empresas sembraron menos de 100 hectáreas, lo que implica que buena parte de la producción se realiza seguramente con fines de autoconsumo.
Del total de 45.168 empresas que sembraron maíz en la última campaña, 22.616 (50%) trabajan exclusivamente en campos arrendados, es decir, no tienen ni una sola “maceta” de tierra propia, mientras que otras 5802 (13%) producen tanto en campo propio como alquilado (en este último segmento es dónde probablemente se concentran productores ganaderos y tamberos que alquilan algunos lotes vecinos o no tanto para asegurarse la provisión de granos).
Ahora, luego de décadas en las cuales se aplicaba el “masomenómetro” para calcular la cantidad de empresas agrícolas sin tierra presentes en la Argentina, es posible conocer con certeza cuántos “inquilinos” y productores propietarios existen en la producción extensiva de granos.
Insólitamente, si bien hace años que esa información está en poder del Estado, dado que en la base del datos del SISA están cargados todos los contratos de arrendamientos realizados por empresas agrícolas, es la primera vez que se da a conocer de manera pública.
Durante la presentación, Solmi dijo que “no vemos en los consumos (demandantes de maíz) el hábito de la utilización de elementos que está brindando el mercado de derivados para ordenar ese consumo en relación a los precios que pueden obtenerse en el mercado de futuros (Matba Rofex)”.
“Nos falta mucho trabajo en eso”, reconoció el funcionario, para luego indicar que está conservando con las autoridades de Matba Rofex para que los consumos (feedlots, tambos, avícolas, porcinos, balancedos, etcétera) logren “una estabilidad de precios que le permita mirar hacia adelante”.