Las situaciones absurdas que enfrenta la ciencia argentina son de no creer: en el INTA Balcarce, que quizás sea el más importante centro de investigación agropecuaria de todo el país, el viernes por la noche desconocidos se llevaron cinco corderos que estaban recibiendo un tratamiento especial en el contexto de una investigación. Pero lejos de maldecir a los ladrones, que seguramente interrumpieron de ese modo un costoso ensayo financiado por todos los argentinos, los directivos del INTA salieron a velar por su salud: advirtieron que el consumo de esa carne podría ser peligroso.
“Les quería avisar que en la reserva 8 del INTA Balcarce nos faenaron cinco corderos que están con un tratamiento de un ensayo y no son aptos para consumo. Estaban puestos en un lugar donde no es fácil acceder. Lamentablemente (los cuatreros) se equivocaron de lote y esto les puede traer consecuencias, porque son corderos que no estaban aptos para consumo. Les agradeceré que den difusión a esto para evitar tener problemas de salud con la gente”, advirtió en un audio que mandó a diversos grupos agropecuarios el jefe del grupo de trabajo Biotecnología de la Reproducción de la EEA Balcarce, el veterinario Federico Hozbor.
ALERTA!
Robaron corderos de las instalaciones del INTA Balcarce.
Estos animales son parte de un ensayo experimental por lo que no son aptos para su consumo. Su ingesta
puede ocasionar graves problemas de salud.— INTABalcarce (@INTABalcarce) June 18, 2022
Al rato, desde la propia estación experimental se confirmó el delito y se reiteró la advertencia: “Su ingesta puede ocasionar graves problemas de salud”, advirtieron para evitar que la población incauta pueda llegar a consumir la carne de esos cinco animales.
Consultado por Bichos de Campo, el propio Hozbor explicó que los animales formaban parte de un estudio “sobre resistencia de los parásitos a los antiparasitarios” en el que “se utilizan drogas y sus combinaciones, y las mismas están aprobadas para animales y llevan un tiempo de carencia antes de ir a faena”. De allí la preocupación por quienes puedan llegar a consumir esa carne robada y faenada de mal modo, en medio del potrero.
Mucho menos “civilizada” fue la reacción del especialista en nutrición animal y docente de la Facultad de Agronomía, Dario Colombatto, de gran actividad en las redes sociales. El experto cumplió con el pedido de sus pares del INTA en difundir la peligrosidad que supone la ingesta de esos animales. Pero mucho menos amable con los delincuentes expresó: “Quiera alguien que a los chorros les salgan verrugas en el upite y en la trompa”.
Le faenaron 5 corderos de un ensayo al área de Producción Animal de INTA Balcarce. Aparentemente no eran aptos para consumo debido al tratamiento. Quiera alguien que a los chorros les salgan verrugas en el Upite y la trompa, por HDP
— Dario Colombatto (@DarioColombatto) June 18, 2022