Anoche la Cámara de Diputados ratificó por 128 votos a favor, 77 en contra y 16 abstenciones la continuidad del “Acuerdo para Promover la Inversión y el Desarrollo de la Provincia de Tierra del Fuego”, que fue suscripto en noviembre de 2021 entre el gobierno nacional y el provincial.
Eso implica que Tierra del Fuego podrá seguir cobrando en los próximos diez años, tal como lo viene haciendo dos décadas atrás, parte de las regalías hidrocarburíferas generadas en la provincia, las cuales son integradas a un fideicomiso (instrumento ideal para evitar un análisis detallado de los gastos).
La diferencia es que, mientras que en el convenio anterior la provincia cobraba el 50% de las regalías, ahora pasará a percibir el 20%, un cifra que, si bien es sustancialmente menor, se compensa con creces con la extensión hasta 2038 del régimen de promoción industrial vigente desde hace décadas.
El fideicomiso, que tiene como objetivo financiar obras viales y infraestructura, es administrado por un comité compuesto por representantes del Estado nacional y de la provincia.
Los 77 votos en contra provinieron del interbloque Juntos por el Cambio (especialmente del PRO) y de los diputados libertarios, mientras que la mayoría estuvo integrada fundamentalmente por legisladores del Frente de Todos.
4ta intervención de hoy, sobre la promoción y desarrollo en Tierra del Fuego. El error de estas promociones es que las provincias terminan siendo más dependientes que al inicio del erario público nacional. Que TDF se baste por si sola para financiar su crecimiento.
(Parte 1) pic.twitter.com/KJH94GmCzD
— José Luis Espert (@jlespert) July 6, 2022
Mientras que los gobernadores de las provincias de la región pampeana sufren la extracción sistemática de recursos a través de derechos de exportación y distorsiones provocadas por intervenciones de mercado, sus pares patagónicos y cordilleranos no se cansan de embolsar parte de las regalías generada por las actividades hidrocarburífera y minera.
La ironía es que las provincias petroleras y mineras incluso recibieron hasta el año 2018 “regalías sojeras” por medio de los aportes provenientes del “Fondo Federal Solidario” (término por demás cínico), mientras que las regalías petroleras ni mineras jamás se redistribuyeron.
TdF