En medio de una pandemia, tres amigos se unieron para intentar darle una solución al transporte de carga de productos refrigerados. Francisco Casciaro aportó sus conocimientos como ingeniero informático, Matías Arguello sus saberes sobre contabilidad y transporte de carne, y Marcelo Gaztambide su especialidad en marketing. De allí surgió Datametric, un dispositivo que permite hacer mediciones de temperatura durante largos períodos de tiempo, asegurándole al comprador que la cadena de frío nunca se cortó.
“Los termógrafos que se usan generalmente tienen una bobina muy precaria. Se colocan en la caja donde va embalada la carne, ya sea enfriada o congelada dependiendo de la modalidad de venta. Lo que suele ocurrir es que no son precisos y se agota su batería”, explicó a Bichos de Campo Francisco Casciaro, uno de los socios del proyecto.
Frente a ese panorama crearon Datametric, un termógrafo que cuenta con un software que permite registrar la temperatura ambiente cada 30 minutos, con un error de medio grado. “Se despierta, toma la temperatura y se duerme. Así logramos una autonomía de por lo menos 100 días”, indicó Casciaro.
El usuario luego puede controlar las mediciones del dispositivo mediante una app que se conecta por bluetooth –ya está desarrollada para Android y próximamente estará disponible para IOS- y ver un registro que incluye fecha y hora. También se conecta con la nube por lo que el cliente recibe en su correo todo el reporte final.
El producto cuesta 80 dólares y por mes se producen entre 250 y 300 unidades. Se considera descartable cuando es utilizado para exportación ya que en difícil recuperarlo. Sin embargo, si el cliente lo regresa, la empresa se encarga de formatearlo para continuar usándolo y en ese caso sólo se paga un valor diferencial.
“Si existiera un convenio con los grandes frigoríficos exportadores estaríamos dispuestos a que sea al costo. Al mercado local no lo vendemos, sino que lo damos en comodato por un abono mensual. Cada cuatro meses hacemos un recambió”, señaló el ingeniero.