El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) confirmó que el pasado 2 de noviembre el Laboratorio Nacional diagnosticó un nuevo caso de influenza aviar en flamencos silvestres en El Peñón, en la localidad catamarqueña de Antofagasta. Esto reavivó los fantasmas de nuevos brotes vinculados a la dispersión de la enfermedad por parte de las aves silvestres y migratorias.
Posteriormente, el hallazgo de 17 flamencos sin vida en Laguna Brava, provincia de La Rioja, avivó esta preocupación. Si bien la Secretaría de Ambiente riojana descartó que pudiese tratarse de un caso de Influenza Aviar, los especialistas de Senasa arribaron al lugar para realizar los hisopados correspondientes, que ya fueron enviados al laboratorio ubicado en Martínez, Buenos Aires.
Previo a eso, las autoridades locales en conjunto con Fauna y Senasa activaron el protocolo de emergencia definido por la resolución 431/2023, que implicó la suspensión del ingreso de personas y vehículos a la zona.
En cuanto al caso de Catamarca, y en función del mencionado protocolo, las autoridades se encargarán ahora proceder con el entierro estipulado, buscando evitar la propagación del virus.
¿Qué ocurrirá con el estatus actual del país? Desde Senasa confirmaron a este medio que por ahora no se han registrado nuevos casos de la enfermedad en aves de corral, por lo que el país continúa siendo considerado libre de Influenza Aviar.
Hay que recordar que la influenza aviar tipo A es una enfermedad contagiosa de declaración obligatoria, causada por un virus que afecta a muchas especies aviares, que es considerada exótica ya que nunca estuvo presente en Argentina. Las aves acuáticas, en particular, se consideran un reservorio importante de este virus.
No veo en la publicación sobre Influenza Aviar en Catamarca que variable es,altamente patógena o una más suave y de menos riesgos.