Aunque este lunes hubo una fuerte baja por el temor a un rebrote de Covid, en las últimas semanas los precios de los granos en el mercado internacional fueron aumentando y tuvieron su reflejo -aunque parcial- en el mercado local. Las causas de esos incrementos son varias.
En diálogo con Bichos de Campo, el analista de AZ Group, Nicolás Udaquiola, explicó algunas razones detrás de esta escalada. “Por un lado está la debilidad del dólar frente a otras monedas como el euro o el yuan, y también los niveles de la tasa definidos por la FED (Reserva Federal) en Estados Unidos. Son medidas que le juegan favorablemente a los commoditties y por eso vemos plata entrando al mercado”.
Pero además de esas cuestiones hay otras que tienen más que ver con la dinámica propia del sector, es decir con las necesidades de la demanda y con la oferta de granos.
Escuchá la entrevista con Nicolás Udaquiola:
Del lado de la demanda propiamente agrícola, además del ingreso de fondos financieros, hay que tener en cuenta las exigencias de China, “que se viene comprando de todo: maíz, trigo y sorgo. Las exportaciones de Estados Unidos están en un nivel como no había hace años para esta época y eso tensiona los precios”, explicó el analista.
Pero también hay factores que impulsan los valores del lado de la oferta. Al respecto Udaquiola indicó: “El mercado se anticipó a los recortes de producción del USDA (Departamento de Agricultura de los Estados Unidos) que todavía no modificó el área de soja en ese país. También al estado de los cultivos, que se siguió cayendo. Eso genera dudas respecto del rinde final”.
Además hay que tener en cuenta lo que pasa en Sudamérica, donde se genera gran parte de la producción global de soja y del maíz que luego se exporta a los mercados globales.
“El mercado mira a Sudamérica, que no puede fallar porque los stocks mundiales se verían fuertemente afectados. Y lo que se ve es que en Mato Grosso aún no se dieron las lluvias necesarias para la siembra y que en Argentina vamos a una Niña y desde marzo no hay una lluvia sustancial. Por lo tanto, desde la oferta hay bastante incertidumbre”.
Ante este escenario del mercado y todos los problemas que tiene la economía local, a nivel del productor hay que tener bien en cuenta las opciones comerciales posibles.
“Una de las medidas con las que venimos insistiendo es no comprometer mercadería de más, porque estamos ante un año Niña que genera incertidumbre. Por otro lado, si ya tenemos un contrato forward armado no conviene comprometer más mercadería, cuando no tenemos los egresos planificados”.
El especialista en mercados agrícolas dijo que “conviene vender y cubrirse en los momentos en los que se necesiten pesos, luego quedarse dolarizado y trabajar con coberturas”, es decir hacer uso de las herramientas que ofrece el mercado de futuros.
Pero, sobre todo, Udaquiola recomendó tener en cuenta las opciones como puts y call, que permiten aprovechar subas o fijar pisos de precios para la mercadería.