Media mañana del lunes, luego del abrumador y sorpresivo triunfo electoral de La Libertad Avanza en las elecciones de medio término. Llega un comunicado a las redacciones: “Ante los resultados electorales de ayer, la Sociedad Rural Argentina coincide con el llamado al diálogo y consenso que realizó anoche el gobierno, de cara a la conformación del nuevo Congreso a partir del próximo 10 de diciembre. En esa instancia propondremos nuestra agenda federal que tiene como objetivo devolverle competitividad al sector agropecuario y políticas públicas que beneficien a toda la ciudadanía”.
Luego dirá la entidad agropecuaria liderada por Nicolás Pino, de visible diálogo con el oficialismo, lo que al sector le interesa que se concilie: “bajar la presión impositiva y el costo argentino, como así también avanzar en obras de infraestructura”. El resto de las entidades de la Mesa de Enlace piensan más o menos lo mismo. Esa es la agenda que el campo aspira a discutir.
La gran pregunta es saber si el resultado electoral de este domingo, sorpresivo para muchos, alcanzará para establecer una nueva dinámica política o simplemente será una nueva expresión de deseos que se verá frustrada.
Lunes, media mañana. En coincidencia con el comunicado de la SRA y otras expresiones del ruralismo, llega a las redacciones un informe elaborado por la Fundación Barbechando, que refleja cuál sería la nueva conformación del Congreso Nacional a partir del 10 de diciembre próximo.
Parece así responder ese think thank agropecuario a la pregunta que nos hacemos todos: ¿Será esta una nueva posibilidad para instalar reformas serias o una nueva desilusión?
De acuerdo con la Fundación Barbechando, esta sería la nueva conformación de las cámaras una vez que se confirmen los resultados en el escrutinio definitivo de los votos:


Tanto en el Senado como en Diputados, los resultados marcan un fuerte crecimiento de las bancadas de La Libertad Avanza más sus aliados, mientras que retroceden las representatividades del peronismo o Fuerza Patria, y se reduce todavía más fuerte las chances de incidir de los partidos considerados como “la tercera vía”.
Para el análisis de esta fundación de productores nacida justamente para tratar de incidir en los debates parlamentarios vinculados con el agro, ahora el nuevo escenario ofrecerá “un Congreso de tercios, pero con un oficialismo robustecido”.
En otras palabras, Barbechando prevé “un Congreso sin mayorías propias, con dos bloques bien definidos y un centro que tendrá un gran poder de negociación”.
“La alianza LLA/PRO en Diputados paso de ser minoría a transformarse en la primera fuerza en diputados (107 bancas) y en Senado amplió su representatividad más de tres veces (de 8 a 25 bancas). El oficialismo tiene garantizado los 87 diputados para sostener vetos”, fue la siguiente conclusión.
En este escenario de representatividades, Barbechando cree que será posible incluir una agenda de reformas con impacto sobre los sectores productivos. “Reforma laboral, reforma impositiva y el presupuesto marcarán la hoja de
ruta del oficialismo”, consideró el análisis, que se ilusiona con una “ventana de oportunidad para que la agenda agroindustrial gane espacio dentro de las prioridades del nuevo Parlamento”.
¿Será o no será?




