Luis Zubizarreta podría ser perfectamente llamado “el hombre orquesta” de la industria aceitera. Sucede que este ejecutivo de Dreyfus ocupa a la vez la presidencia de varias cámaras vinculadas de modo muy estrecho a esa actividad: la de los grandes prodoctores de Biodiésel (Carbio), la de los Puertos Privados, y más recientemente fue elegido para conducir la Asociación Argentina de la Cadena de la Soja (Acsoja).
Sabido esto, es obvio que no hay tema vinculado que se le escape a Zubizarreta. Por eso Bichos de Campo aprovechó una charla con el para revisar la agenda de temas que ocupan y preocupan al sector. No figuran las retenciones porque la entrevista fue previa a la corrección del esquema tributario. Pero la novedad es que las empresas que explican el grueso de las exportaciones del país, con 30% de los envíos totales, están sacando punta al lápiz porque quieren discutir, en poco tiempo más, qué hacer con la Hidrovía Paraná-Paraguay, luego de que venza la concesión, en 2021.
Mirá el reportaje completo con Luis Zubizarreta:
La charla con Zubizarreta nos permitió revisar diferentes temas:
- Sobre la inédita bajante del Río Paraná, el empresario descartó que los puertos aceiteros ubicados en los alrededores de Rosario puedan ver afectada su actividad en las próximas semanas, como algunos temían. “Los barcos salen con menos carga y eso hace que el flete se encarezca. Pero contra eso no podemos hacer mucho. Creemos que va a venir más agua hacia la primavera y eso regularizará la situación”, afirmó.
- Zubizarreta adelantó el interés del sector en formar parte de la discusión para la nueva concesión de la Hidrovía, el circuito por donde salen casi 80% de las cargas agrícolas del país. “Obviamente nosotros queremos que se profundice, porque tener más profundidad es tener los puertos más cerca de la producción, y eso ahorra costos en fletes. Pero hay que ver cuanto cuesta. Es el debate que se viene, ya que la concesión vence en 2021. Es un buen momento de que discutamos cuáles van a ser los pliegos de la próxima concesión y cómo hacemos para generar competencia, también para que el costo del peaje sea el más razonable posible”. El momento de revisar ese esquema de negocios, por cierto, no podría ser mejor, porque el dueño de la empresa concesionaria, Gabriel Romero, acaba de admitir que pagó millonarias coimas al gobierno kirchnerista para la renovación de la concesión.
- Sobre los reiterados conflictos para exportar bidiésel, Zubizarreta dijo que la situación conflcitiva con Estadso Unidos quedó stand by, y que solo podría destrabarse con una gestión política a nivel de presidentes. “Sabemos que Macri tiene el tema en su agenda”, se consoló. Respecto de la Unión Europea, señaló que hay mucha preocupación por la nueva investigación por presunto dúmping cometido por las fábricas argentinas que abrieron los europeos. “Estamos muy preocupados. El impacto si cierran el mercado sería que se paraliza la industria del biodiésel. Y en un año normal será muy difícil vender el aceite”, explicó.
- “Creo que puede salir pato o gallareta”, evaluó el ejecutivo sobre la guerra comercial declarada entre China y Estados Unidos y su posible impacto sobre las exportaciones de soja de la Argentina. “Todo dependerá de lo inteligentes que seamos en movernos”, evaluó. En ese sentido, consideró que la Argentina debe negociar con China junto a Brasil y los países del Mercosur para consolidarse como exportadora de productos de mayor valor agregado y no solo del poroto.
- Finalmente Zubizarreta pasó el chivo del próximo congreso de Acsoja, que se realizará el 27 de septiembre, con entrada libre y gratuita. “El objetivo es llevar optimismo, porque con la crisis en la Argentina estamos un poquito para abajo. Hay que poner los faros largos y nosotros creemos que la Argentina tiene una gran oportunidad, y este sector -en referencia a la industria sojera- tiene parte de esa responsabilidad”, aseguró el ejecutivo.