Luis Miguel Etchevehere, el secretario de Agroindustria, no discute que debió tragarse “un par de sapos” en los últimos meses, especialmente la degradación de esa área de Gobierno y la reimplantación de retenciones a todos los productos del agro. Pero, fiel militante del gobierno de Cambiemos, el funcionario relativiza esas definiciones y las enmarca en un proceso político.
“Independientemente del nombre del cargo lo importante es la política, que sigue exactamente igual desde el primer día en que asumió el presidente Mauricio Macri”, señaló el funcionario en diálogo con Bichos de Campo. Destacó que esa política se basa en la búsqueda de competitividad, en la desburocratización, en la apertura de nuevos mercados, y en mantener una relación inteligente con el resto del mundo.
En pleno inicio de una nueva campaña sojera y con un contexto de gran volatilidad económica, además, el funcionario recomendó a los productores pelear rubro por rubro porque, según dijo, “hoy, sin dudas, hay costos inflados”.
“¿Cuántas cosas sabemos que no tienen componentes en dólares y te lo suben porque subió el dólar? ¡Un montón!”, graficó Etchevehere. Que agregó: “Las cosas terminan valiendo lo que alguien las paga, y uno termina convalidando precios por encima de lo que deberían valer”.
Por eso, Etchevehere remarcó que la prioridad del Gobierno es controlar la inflación y dio a entender que toda la política agropecuaria está por ahora subordinada a esa prioridad. “Tenemos que estabilizar la moneda, no se puede calcular un costo si no sabemos cuánto valen las cosas”, remarcó.
Mirá la conversación completa del Secretario de Agroindustria con Bichos de Campo:
Respecto al rumbo económico que aplica el Gobierno, el ex ministro reconoció que la idea original era seguir con el gradualismo y poner en marcha al sector productivo con reformas de fondo para generar empleo. Pero en el medio, se sabe, pasaron cosas.
“Pasó lo que pasó, el corte al financiamiento y todo lo que conocemos. Ahora, ojalá que podamos llegar el año que viene al déficit cero para que sigan bajando la inflación y la tasa de interés. Y nosotros seguir arreglando cosas de competitividad estructural. Una vez que esté arreglada la economía, nos vamos a dar cuenta de todo lo que rinden” ese tipo de soluciones, afirmó.
Los temas de competitividad estructural a los que se refirió el Secretario son, por ejemplo, la quita de aranceles de los puertos, la habilitación de los bitrenes para el transporte de cargas, la firma de protocolos sanitarios y la apertura de mercados para los productos agropecuarios.
Además destacó el funcionamiento de las mesas de competitividad. “Es sencillo pero muy rendidor. Si vos cada dos meses tenes a todos los eslabones de la cadena pidiendo cosas y a los funcionarios que tenemos las atribuciones para resolverlo, no hay verso, hay que dar una respuesta”, dijo.
Etchevehere enumeró luego tres pilares de lo que intentan impulsar desde la cartera de Agroindustria para el sector privado: formalidad laboral, formalidad sanitaria y formalidad impositiva.
Por parte del Estado, según Etchevehere, el compromiso está puesto en bajar el gasto político. “Hicimos una reducción de 3.000 contratos, recortamos 1.400 millones de pesos anuales y devolvimos tres edificios, porque los impuestos también son consecuencia de los gastos que tenés”, remarcó.