En mayo, la economía creció sólo un 0,1%. Así lo establece el índice mensual de actividad económica elaborado por el Centro de Investigación del Ciclo Económico (CICEc). Es una muy magra recuperación que revierte el 0,1% negativo de marzo, y el 0% de abril, pero demuestra que la tan mentada recuperación económica no avanza conforme lo esperado.
En ese esquema compuesto por 10 indicadores, el único sector que dio muestras de crecimiento notable fue el del agro: En mayo, el producto de los principales cultivos extensivos se incrementó un 7,9%. Esa cifra, vehiculizada por el ritmo que tuvo la cosecha gruesa, está muy por encima del resto de los sectores evaluados por las Bolsas de Comercio de Rosario y Santa Fe.
La postal se repite y nuevamente se pone de manifiesto que el Gobierno tiene mucho que agradecer al agro. Y es que, aún en un mes signado por los desequilibrios desencadenados por la guerra comercial, el sector mostró buenas señales de actividad y ayudó a matizar los números en rojo de 6 de los 10 indicadores que componen el informe mensual.
Sin dudas fue gracias al avance de la trilla de soja y los incentivos que generó la baja temporal de retenciones, que a partir del próximo 1 de julio volverán a sus niveles iniciales.
Los otros sectores que mostraron números en verde fueron el patentamiento de vehículos nuevos, que se incrementó un 0,8% y acumula 15 meses de suba, y la tasa de entrada al mercado laboral, que mostró una recuperación del 0,7%. Así y todo, hubo números en rojo en los asalariados privados registrados (- 0,1%) y en la remuneración bruta de estos, que se retrajo un 0,7%.
De acuerdo al informe publicado por el CICEc, la caída en la recuperación económica “se explica, principalmente, por un freno en los últimos meses en la recuperación de la industria, las importaciones, el poder adquisitivo de los salarios y los puestos de trabajo registrados, que hicieron mella también en la recaudación del gobierno nacional”.
Y es que en mayo, la cartera de Luis Caputo vio caer sus ingresos por tercer mes consecutivo. Esta vez, la recaudación descendió un 0,3% y los factores más influyentes fueron la rebaja en los derechos de exportación para los principales productos agroindustriales y una caída en las importaciones, que en mayo retrocedieron un 1,3%.
Cabe señalar que en este último aspecto también entra en juego la vigencia plena de la salida del cepo, ya que mayo fue el primer mes completo en el que se implementó la liberación del esquema cambiario y el sistema de flotación entre bandas.
En el caso de la producción industrial, la caída fue del 0,2%, mientras que la construcción cortó con su racha alcista y se retrajo un 0,9%. En cuanto a las ventas minoristas, no hubo variaciones, lo que muestra una desaceleración respecto a los últimos 7 meses.