Los productores brasileños de soja están viviendo en una suerte de “realidad paralela”, ya que están cobrando precios que están muy por encima de los percibidos por sus competidores.
Este miércoles el precio de referencia de la soja entregada en el puerto de Paranaguá fue de 423 u$s/tonelada, según el valor de referencia publicado por el Centro de Estudios Avanzados de Economía Aplicada (Cepea).
Esa cifra contrasta de manera brutal con los 391.300 $/tonelada que se operaron en promedio hoy en el norte del Gran Rosario, Argentina, cifra equivalente a 295 u$s/tonelada considerando el tipo de cambio BNA divisa comprador.
Además del derecho de exportación del 26,0% sobre el poroto de soja, el FOB argentino es mucho menor que el brasileño, ya que en este último país comenzó la “temporada baja” comercial de la oleaginosa y la demanda china sigue “aspirando” cargamentos como si no existiese un mañana.
El gobierno chino está propiciando la originación de soja en el Mercosur, con Brasil a la cabeza, para poder encarar las negociaciones comerciales con EE.UU. con una situación mucho más ventajosa.
La apreciación del real brasileño no permite evidenciar en la plaza de ese país el repunte del valor de la oleaginosa en toda su plenitud, lo que conspira contra las decisiones de venta por parte de los productores (los empresarios agrícolas brasileños, a diferencia de los argentinos, piensan en reales; no en dólares).
En lo que respecta al FOB Golfo de México, el precio de la soja está experimentando una fase declinante no sólo por razones estacionales, ya que en pocas semanas comienza la cosecha, sino también por las dudas existentes sobre la evolución de las negociaciones comerciales entre EE.UU y China.