Los precios de la hacienda en el Mercado de Liniers están mejorando. Sin prisa. Pero también sin pausa. Las cotizaciones del ganado para faena esta semana registraron subas continuas en las tres jornadas comerciales.
Los ingresos a ese mercado fueron moderados, en ningún caso superaron las 8000 cabezas y además, según operadores, se está complicando conseguir hacienda terminada en forma directa.
Se siente en el mercado el bajo nivel de encierre de los feedlots como consecuencia de las pérdidas económicas que vienen arrastrando. Según el último informe de la cámara que los agrupa, el nivel de ocupación en los corrales era de sólo 56% al inicio de este mes, lo que da cuenta de una alta capacidad ociosa por la falta de rentabilidad del negocio.
En el Mercado de Liniers los novillos promediaron hoy 245 $/kg, los novillitos 266 $/kg, las vaquillonas 255 $/kg y las vacas 186 $/kg. Para novillos, novillitos y vaquillonas la suba nominal respecto de los promedios de los primeros días de enero se ubicó entre 12% y 15%, mientras que para las vacas fue del 18%.
En el caso de las haciendas livianas destinadas al consumo interno, la mejora tiene que ver con la escasez y con una mayor demanda evidente en febrero tras el regreso de las vacaciones. En el caso de las vacas gordas –categoría destinada mayormente a la exportación– la suba obedece a la fuerte demanda china, que sigue firme pese a los menores pedidos registrados estacionalmente durante el año nuevo lunar, aunque la oferta presente en el mercado argentino también es acotada porque aún no llegó la “temporada alta” de descartes de vacas.
Algunos analistas ganaderos estiman que, en el actual escenario de escasa disponibilidad de hacienda con retención de vientres, los precios de las categorías gordas seguirán firmes en el transcurso del presente año.
Resta saber qué hará el gobierno nacional en caso de que eso suceda, dado que los funcionarios que siguen el tema ya dieron señales de que están dispuestos a restringir exportaciones en el marco de embarques cuotificados en el cual opera el sector desde el segundo trimestre de 2021.
El ternero sigue tan firme como la necesidad de preservar el capital en un escenario inflacionario