“A pesar del fuerte rechazo del mercado internacional (al trigo transgénico) en los últimos 20 años, lamentablemente Brasil será conocido como el primer país en aprobar el uso del trigo transgénico en el mundo”. Así lo apuntó este jueves La Asociación Brasileña de la Industria del Trigo (Abitrigo) en un comunicado que sacó para posicionarse en contra de la medida de la Comisión Técnica Nacional de Bioseguridad (CTNBIO) de ese país para habilitar la comercialización de harina del trigo HB4, desarrollada en Argentina por la empresa Bioceres.
La asociación de molinos brasileños (país que depende bastante del suministro del trigo argentino) alertó que podría llegar a efectuar denuncias judiciales para que se analice en profundidad las consecuencias que tendría una decisión como esta tanto para la industria como para los consumidores.
“Solicitaremos a la Casa Civil de la Presidencia de la República que convoque de inmediato al Comité Nacional de Bioseguridad, integrado por varios Ministros, para analizar, de manera más integral, las implicaciones de la presencia de trigo transgénico en Argentina en el mercado brasileño”, avisó el presidente de Abitrigo, Rubens Barbosa.
Además, la organización empresaria hizo hincapié en que la decisión fue tomada sin tener en cuenta criterios en relación a la seguridad y sin profundizar en el estudio de las condiciones del mercado.
Sobre esto punto, especificaron que provocaría un impacto en “el deseo del consumidor brasileño” y que tendría “consecuencias para la cadena de trigo en Brasil”. Precisaron los molinos que incluso la decisión podría afectar las exportaciones de subproductos que comercialicen desde ese país, como la pasta, las galletas y el pan.
“Abitrigo analizará la toma de medidas cautelares para suspender la implementación de la decisión de la CTNBio hasta el pronunciamiento del Comité Nacional de Bioseguridad”, alertó al final del comunicado la organización.