Los fondos agrícolas que operan en el CME Group (“Chicago”) siguieron recortando esta semana “apuestas” bajistas en maíz estadounidense, mientras que se muestran cautos en lo que respecta a soja.
Así lo reflejan los datos publicados este viernes por la Commodity Futures Trading Commission. Las posiciones netas surgen de la diferencia entre las posiciones compradas (“long”, que fijan un precio techo y por ende apuestan a un mercado alcista) y las posiciones vendidas (“short”, que fijan un precio piso y por lo tanto apuestan a un mercado bajista). Tales registros se difunden con algunos días de retraso para evitar que tal información impacte en las cotizaciones de granos.
En lo que respecta al maíz, si bien EE.UU. va camino a un cosechón monumental, la exportación del cereal en ese país está mostrando una dinámica formidable: el compromiso comercial de maíz 2025/26 estadounidense es a la fecha alcanzó un récord histórico
Este viernes el USDA indicó que al pasado 28 de agosto el compromiso comercial de maíz estadounidense 2025/26 suma 20,8 millones de toneladas, una cifra 186% superior a la registrada en la misma fecha de 2024 y 2,1% superior al anterior récord registrado en 2021.
La estrategia de “bullying comercial” emprendida por el presidente Donald Trump está dando buenos resultados, ya que los socios comerciales de EE.UU. (México, Japón, Corea, Taiwán, Colombia y la Unión Europea) están aumentando compras del cereal estadounidense para hacer “buena letra” y no recibir “arancelazos” por parte del mandatario de EE.UU.
También crecieron fuerte las compras realizadas por parte de Vietnam en el marco del acuerdo bilateral impulsado por Trump para reducir el déficit comercial con esa nación asiática.
Sin embargo, en soja ocurre lo contrario: al desafiar a China, Trump provocó una suerte de bloqueo comercial de facto, ya que la nación asiática no compró un solo poroto de la nueva cosecha 2025/26.
Si bien los socios comerciales de EE.UU. también están haciendo esfuerzos por aumentar las compras de poroto y harina de soja de ese origen, eso no alcanza para llenar el “bache” dejado por China, lo que genera un interrogante sobre la evolución de las cotizaciones del poroto estadounidense.
En las últimas jornadas, debido a la presión de demanda que está ejerciendo China en Brasil, junto con la ausencia en el mercado de EE.UU., el divorcio entre los valores FOB de ambos orígenes volvió a ensancharse para ubicarse en torno a los 40 u$s/tonelada.