Los bonos de carbono, o “bonos verdes”, vienen ganando espacio en la agenda de debate tanto público como privado, ya que hasta ahora parece ser una forma de mitigar las causas del cambio climático bastante rápida y eficiente.
En nuestro país, este tema toma real importancia ya que nuestra forma de producción de commodities y alimentos es el salvoconducto ideal para que los grandes países contaminantes del ambiente puedan lavar sus culpas, equilibrar esa emisión dañina, y a su vez resarcir económicamente por ese daño. Ahí es donde entra Argentina, que puede llegar a convertir la sustentabilidad en generación de divisas.
La forma en la que esto se podría llegar a dar, es explicada por Matías Tortorella, presidente de Gestionar, un fondo de inversión con arraigo sustentable, quien describe: “Si, pueden ser un token más. Un token que valga y valga muy bien. Obviamente que eso tiene que medirse y certificarse, pero podría ser. No sé si como el bitcoin, pero sí claramente una transacción que puede ser financiera mediante tokens o blockchain”.
Tortorella explica además la potencialidad que tiene Argentina, y la forma de producir: “Si nos comparamos con otros países, como Estados Unidos, en Illinois el 15% de la superficie está en siembra directa y los cultivos de cobertura son aproximadamente el 2%. En Argentina nosotros estamos muy por encima de eso, arriba del 80% de siembra directa. Tenemos cultivos de cobertura cada vez más importantes. Estamos muy bien, vamos bien. No quiere decir que no podamos ir cada vez mejor, pero Argentina tiene todo a nivel tecnológico, a nivel productores, tanto en agricultura como ganadería. La mayor cantidad de producción ganadera de Argentina es sobre pastizales naturales y sobre pasturas implantadas, sin tanto feedlot”.
Es por esto, que el especialista remarca: “hay que desterrar que el Fondo Inversión busca solo rentabilidad. Hoy el inversor busca rentabilidad, pero de la mano de lo sustentable. Y Argentina y los productores agropecuarios argentinos de por sí ya tenemos esa sustentabilidad en siembra directa. Nosotros sembramos cultivos de coberturas que son cultivos verdes, que son los que en invierno mantienen verde el suelo y capturan carbono”.