La Sociedad Rural de Jesús María publicó recientemente un comunicado de las Rurales del Arco Noroeste de Córdoba, en el que denuncian ser estafados por el gobierno provincial, y maniobras relacionadas con anuncios que no terminan siendo tales.
Los productores agropecuarios habían tomado con benéplacito el aumento del impuesto inmobiliario rural en torno al 29% previsto en el Proyecto de Presupuesto provincial 2026, que fue elevado a su debate parlamentario.
Sin embargo, de acuerdo a lo que contaron en el comunicado de prensa publicado, las áreas técnicas de las asociaciones de productores decidieron revisar la propuesta, y se encontraron con algunas sorpresas.
Según explican los ruralistas, las ponencias de los cuadros técnicos “no convencieron” y es por eso que las rurales se propusieron revisar los números oficiales y llegaron a un resultado que contradice los anuncios realizados. De acuerdo a lo que dijeron, esto “muestra el ineficiente manejo de los recursos de los productores de nuestra región”.
“La sorpresa fue mayor cuándo quedó expuesto un problema estructural mucho peor: la sub-ejecución del Fideicomiso para el Desarrollo Agropecuario (FDA). Esta supuesta herramienta que debería financiar obras, infraestructura y mejoras productivas, no parece estar enfocada en ello. Así, con los datos públicos en la mano vemos que durante el último año la partida destinada al FDA fue sub-ejecutada, estando sin uso a la fecha el 60% de ese fondo de recursos generados por el propio sector productivo”, aseguran los ruralistas cordobeses.
Esta situación, según entienden, “vuelve a justificar el acierto de nuestra razón de ser y la conforman; pues, a los productores del noroeste provincial nos siguen ninguneando”.
A su vez, de acuerdo a los datos de los productores agropecuarios, mientras se eleva el pago del inmobiliario rural, la asignación de recursos al sector productivo se reduce drásticamente, por lo que creen que se recaudará más desde el bolsillo de los productores, pero se invertirá menos en el desarrollo de la infraestructura para dicho sector.
Los ruralistas lo explicaron así: “Es más grave aún otra evidencia. Mientras se aumenta de manera acordada la carga tributaria en un 29%, la asignación al FDA se reduce en un -33,6%. La ecuación es tan simple como alarmante: se recaudará más y se invertirá menos. ¿En qué quedaron entonces los amanuenses concordantes?, en la foto estamos seguros por lo visto”.
El descubrimiento, recuerdan los ruralistas, llega en un momento en que la región arrastra un déficit histórico de obras viales, hídricas y de infraestructura, caminos rurales sin mantenimiento, falta de inversión estratégica y un deterioro creciente que impacta en la competitividad y en la vida cotidiana de miles de familias productoras y sus comunidades.
Sobre esto, los productores remarcaron: “Desde las Rurales del Arco Noroeste de Córdoba queremos de manera urgente transparentar los criterios de ejecución de FDA; cómo también auditar y garantizar su correcta aplicación. Asegurar que cada peso que aporta el productor vuelva al territorio en forma de obras y mejoras concretas, no en fotos o anuncios para los obsecuentes o los mismos integrantes de una mesa que no representa a todos, mientras solo son sonrisas con las autoridades ejecutivas de nuestro sector”.
A modo de despedida, los ruralistas subrayaron: “El noroeste cordobés no puede seguir siendo la variable de ajuste en cada presupuesto. Más aún cuando se evidencian ineficiencias, preferencias y desidia”.




