En la última jornada se registraron lluvias y chaparrones generalizados en buena parte de la zona central y norte del territorio argentino.
Los mayores acumulados se presentaron en Tucumán, Santiago del Estero, noreste de Chaco, Formosa y norte de Corrientes. También en una porción del sudeste cordobés y el sector este de Entre Ríos.
Sin embargo, los sectores que vienen arrastrando un déficit hídrico sustancial siguen sin recibir precipitaciones suficientes para poder revertir el actual escenario de sequía.
Las regiones más comprometidas son la zona núcleo pampeana, noreste de Buenos Aires, este y norte de Córdoba, sudeste de Santiago del Estero, sudoeste de Chaco y parte del norte de Santa Fe.
La mala noticia es que el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) no proyecta la ocurrencia de nuevas precipitaciones en el transcurso de la presente semana, lo que implica que, con las elevadas temperaturas normales para la época, la compleja situación en las regiones con sequía se seguirá agravando.
La campaña de primera siembra de granos gruesos ya está perdida en buena parte de las regiones agrícolas clave de la Argentina, lo que ocasionaría, en términos relativos, una producción agrícola escasa para el segundo trimestre de 2023.
La esperanza reside en una recomposición de la situación hídrica durante el transcurso del próximo mes de diciembre para que así sea posible avanzar con siembra tardía de maíz y soja.