Argentina está registrando un desabastecimiento de gasoil en pleno comienzo de la cosecha de granos gruesos, que son, nada menos, que la principal fuente de divisas de la economía.
Estaciones de servicio con largas filas de espera y con establecimiento de cupos de venta son las primeras imágenes de un otoño que promete ser una pesadilla logística para empresarios agropecuarios, contratistas rurales y transportistas.
En algunas semanas más se requerirá cosechar y transportar grandes volúmenes de maíz y soja y los problemas que se están registrando en la actualidad se exacerbarán.
¿Cómo se llegó a eso? “El petróleo que es producido en los yacimientos no convencionales de Vaca Muerta es fundamentalmente naftero, dado que no tiene la calidad suficiente para elaborar gasoil”, explicó Eduardo Barreiro, consultor energético con décadas de experiencia en el sector.
El faltante de gasoil en distintas zonas del país es un problema que tiene que tener solución inmediata. No podemos encarar una cosecha con problemas de abastecimiento de este insumo clave.
— Nicolás Pino (@NicolasPinoSRA) March 29, 2022
“El crudo para elaborar gasoil es necesario importarlo y los precios en el mercado internacional están tan volátiles, por el conflicto geopolítico, que las refinerías no quieren importar petróleo mediano pesado por los riesgos comerciales que eso implica”, añadió.
¿Entonces? ¿Qué opciones existen para resolver el problema? El consultor indicó que, en la actual coyuntura, una alternativa para salir del apuro sería realizar acuerdos entre grandes cooperativas agropecuarias y refinerías petroleras con el propósito de que las empresas energéticas gestionen importaciones de petróleo liviano para elaborar gasoil y luego venderlo a la cooperativa en cuestión al precio de paridad del crudo ingresado al país.
“Con eso se asegurarían la disponibilidad de gasoil”, indicó Barreiro, aunque, al no haber antecedentes en la materia, la posibilidad de acordar y materializar tales contratos luce lejana en la actual situación de urgencia.
¿Alguna otra alternativa? “Usar biodiésel de producción local sería una solución nacional”, comentó Barreiro. “No hay ninguna limitación para usar biodiésel con los motores presentes en los tractores y cosechadoras actuales, así como tampoco en los camiones. Es más: con el biodiésel los motores trabajan incluso mejor y no se pierde potencia respecto del uso de gasoil fósil”, afirmó.
No cargan más de 100 lts de gasoil a los camiones.
Un camión cargado, con 100 lts hace aproximadamente 250 km. Al puerto de Bahía Blanca tenemos 840 km ida y vuelta. Mandas a los camioneros sin certeza de que puedan volver?
País tan de cuarta podemos ser? Es muy triste!
— Vasco Sallaberry (@VascoSallaberry) March 29, 2022
“¿Cómo puede ser que en un país que tiene biodiésel de sobra haya problemas de falta de combustible para tractores y cosechadoras? No tiene sentido. La guerra y los problemas derivados de la misma no van a terminar mañana, con lo cual es necesario buscar soluciones concretas no sólo para lo inmediato, sino también para los próximos meses”, advirtió el consultor.
Ahora bien, si bien técnicamente eso sería una solución factible, ¿podría serlo en lo concreto en función de la situación presente en la industria? Para responder esa pregunta Bichos de Campo consultó a Luis Zubizarreta, presidente de la Cámara Argentina de Biocombustibles (Carbio), que agrupa a las principales compañías elaboradoras del biocombustible.
“El biodiésel elaborado en el país se puede usar perfectamente para recolectar y transportar la cosecha gruesa, pero para eso sería necesario que el gobierno habilite esa posibilidad en un marco de competencia entre las empresas”, explicó Zubizarreta.
“La capacidad de respuesta del biodiésel no es infinita, porque existen compromisos de exportación que deben cumplirse, pero la industria cuenta con capacidad ociosa y es factible incrementar la producción actual”, aseguró.
Si bien es probable que el valor final del biodiésel, en condiciones de mercado, termine siendo superior al precio del gasoil, también lo es el hecho del enorme perjuicio económico generado por no contar con combustible suficiente para poder cosechar y transportar los granos sin los cuáles el país se quedaría sin divisas (con el drama que eso implicaría).
“Existe una posibilidad cierta de aumentar la producción de biodiésel destinado al mercado interno y creo que podría ser de ayuda para la solución del problema presente en la actualidad”, resumió el presidente de Carbio.