La nutricionista Carolina Ramos (su MP es 2181) advirtió que “la última Encuesta Nacional de Nutrición y Salud (ENNyS), cuyo resultado dio a conocer en septiembre de 2019 el Ministerio de Salud, evidenciaba el bajo consumo que hay en frutas y verduras, un grupo de alimentos muy importantes para prevenir muchas enfermedades”.
Entrevistada por Bichos de Campo acerca de por qué comemos tan mal los argentinos, Ramos reconoció que hay una cuestión cultural y muchas veces, de rechazo hacia frutas y verduras. “Hay gente a cuyo paladar no le agrada, y no hay forma de hacerles entender que consuman. Hay rechazo por lo sano y saludable y tiene que ver con la creencia, con lo cultural y lo social. Si mamá y papá no consumen frutas, difícilmente sus hijos lo hagan. Es un hábito”, reveló.
“Hablamos de equidad alimentaria, pero también debemos hablar de equidad nutricional, que en el país es bajísima. La gente en situación de pobreza tiene menor consumo de estos alimentos. Y si yo les doy alimentos en cantidad pero en baja calidad nutricional, estamos en la misma. Antes, en los bolsones se daban legumbres secas, hoy se dan enlatadas, con sodio y conservantes. Hoy te suman harinas refinadas, de trigo o polenta”, reflexionó.
¿Y qué se consume en lugar de frutas y verduras? Ramos señaló que “las ENNyS indicaron que los mayores consumos se dan en cereales y derivados tales como harinas y panificados. Asimismo, creció el consumo de productos industrializados tipo snacks, los cuales se contraponen a las frutas y verduras por estar listos para ser consumidos, y por tener agregados químicos y resaltados de sabor”.
Mirá la entrevista completa a Carolina Ramos:
La nutricionista advirtió que “esta problemática es global. Las estadísticas mundiales indican que consumimos un tercio de las frutas y verduras que deberíamos consumir, o sea que estamos por debajo de la mitad”, en alusión a que deberíamos multiplicar dos veces lo que consumimos hoy para llegar a un nivel óptimo.
Ramos, que también es profesora universitaria y miembro del Círculo de Nutricionistas del Norte de la provincia de Buenos Aires, intentó explicar por qué los argentinos consumimos tan pocas frutas y verduras, y señaló que una de las más frecuentes que le acercan sus pacientes en las consultas es la del poco tiempo con que cuentan para cocinar o elaborar. “Esa sería lo que yo llamo una de las excusas que se ven en la consulta, pero a eso hay otros factores que no son menos importantes”, aclaró la especialista.
La nutricionista, que comparte información a través de su red social, Instagram, remarcó que “el factor económico influye; siempre las frutas y verduras tienen un plus agregado en cuanto al precio. Del mismo modo, no es lo mismo comprar un kilo de harina refinada que comprar un kilo de harina integral o salvado. En muchos casos el costo de comprar estos alimentos es de hasta el doble. Y la crisis que hoy vivimos influye en la toma de decisiones de compra, y más cuando el grupo familiar es grande”.
La publicidad es buena responsable, según Ramos, de que los productos ultra procesados tengan buena aceptación, y es, por cierto, una gran adversaria de su trabajo diario. “No solemos promocionar la fruta o verdura. Siempre se promocionan los alimentos altos en azúcar y en sodio. La publicidad sostiene un programa o canal, y es lo que vende, pero algo mal estamos haciendo porque cada vez nos enfermamos mas”, alertó.
Sin embargo, la nutricionista dijo que hay espacios de conciencia que se van abriendo de a poco. “Hace años que hay kioscos saludables. También se empezó a ver la iniciativa de dar colaciones o meriendas saludables en las escuelas, pero no siempre lo que baja de Salud o Nación es aplicable a ciertas ciudades o escuelas donde quizás el consejo escolar tiene una cierta disponibilidad económica y entonces lo que se baja no pueden llevarlo a la práctica”, reconoció.
Otro de los motivos acerca de porqué comemos mal está relacionado, de acuerdo a la especialista, a los mitos que se crean en torno a los llamados “influencers” que participan de redes sociales y de gente que cree y compra ideas que no son reales. “Por ejemplo, en cuanto a frutas y verduras, muchas veces vienen pacientes y me dicen que no consumen porque tienen pesticidas y que si las consumen pueden llegar a contraer cáncer”, disparó.
Más allá de que esas frutas y verduras se elaboren o no con agroquímicos, Ramos remarcó que “lo que primero recomiendo es que se consuman más frutas y verduras, algo que está a la vista que no estamos haciendo. Lo otro es un tema controversial y al que creo que hay que citar a gente más capacitada que yo, y aún así no sé si podamos sacar una conclusión simple del tema”.
Ocurre que el miedo termina pesando en la decisión de consumo de frutas y verduras. “Por eso hay que ser concientes a qué mensaje bajamos a la población. Como nutricionista, mi consejo es que se consuman. Luego hablamos de su forma de producción y discutimos todo lo que quieran”, concluyó.
¿Cuál es el ranking de frutas y verduras según Carolina Ramos? “Lo importante es consumir frutas y verduras en estación. Ahora en invierno, por ejemplo, los cítricos; es lo doble mejor para aconsejar, por un lado por la parte económica. La fruta de estación suele ser la más accesible, y por otro lado, tiene mayor biodisponibilidad en cuatro nutrientes”, declaró.