“No existe un compromiso real de diálogo ni tampoco se busca articular consensos por parte del Gobierno nacional en pos de generar desarrollo productivo, social y económico”, definió la Mesa de Enlace al declararse en estado de “alerta” ante las nuevas medidas adoptadas por el Poder Ejecutivo para controlar las exportaciones. Entre ellas, sobresale hoy la recreación de los registros de exportación para ciertos productos agropecuarios.
Esas medidas, tomadas entre ayer y hoy por el Ministerio de Agricultura y la Secretaría de Comercio Interior, irían a contramano de las promesas que les habría hecho el presidente Alberto Fernández a los ruralistas en su última audiencia de febrero pasado. Por eso, en un comunicado, los dirigentes del campo consideraron que “aquellas promesas fueron sólo una puesta en escena para confundir a la opinión pública”.
El viernes pasado, frente a “la escalada de declaraciones públicas por parte de funcionarios acerca de la reinstauración de mecanismos de probada ineficacia como el registro de exportaciones”, el bloque que en 2008 enfrentó al gobierno de Cristina Kirchner pidió una audiencia a los ministros de Economía, Martín Guzmán; de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas; y de Agricultura, Luis Basterra. Es que de ese Gabinete Económico surgió, el jueves pasado, la decisión de comenzar a intervenir con mayor fuerza los mercados de productos agropecuarios.
“Dichas solicitudes se sustentaban en la promesa de que hiciera el presidente de la Nación durante su último encuentro, cuando aseguró que antes de tomar cualquier medida de alto impacto para el sector, se conversaría con esta Comisión de Enlace”, recordaron los ruralistas, que en febrero fueron convocados de urgencia por Alberto, quien se ocupó de aclararles -ante un reportaje suyo publicado en Página/12– que había sido malinterpretado y que su gobierno no tenía pensado imponer restricciones a la exportación, como cupos o mayores retenciones.
La realidad es que dos meses después ninguna de esas medidas se aplicaron, pero desde el lunes Agricultura y Desarrollo Productivo están dictando normas que recuerdan las peores épocas de intervención a los mercados de carnes, granos y lácteos.
“Al momento, no sólo no hubo respuestas de parte de los funcionarios sino que, contradiciendo su compromiso una vez más, el Gobierno publicó en el Boletín Oficial de hoy la puesta en marcha de una nueva Declaración Jurada de Operaciones de Exportaciones de Carne”, recordaron desde Sociedad Rural Argentina, CRA, Coninagro y Federación Agraria.
Para los dirigentes agropecuarios está más que claro el panorama: “Esta medida recuerda a los nefastos ROE, por medio de los cuales se restringían y direccionaban discrecionalmente las exportaciones de bienes de origen agropecuario, y causaron un daño irreparable a la producción”, se remarcó.
En la Mesa de Enlace cayó muy mal otra disposición publicada el lunes:Se trata de la Resolución 60 de Agricultura, “que establece una serie de resoluciones y cumplimientos para quienes deseen exportar”.
“Ambas medidas se suman a otras políticas implementadas anteriormente en forma inconsulta, perjudicando siempre al productor, que necesita incentivos promocionales para seguir produciendo bienes y colocarlos en el mercado interno y externo”.
Los dirigentes del campo ya piensan en convocar a algunas asambleas, para evaluar los pasos a seguir. La explicación es que “esta situación nos pone en estado de alerta y abre un tiempo de consulta con nuestras bases, porque rompe con la promesa de diálogo que hicieron las autoridades y demuestra un altísimo desinterés en los productores y en el sector, que tantas divisas aporta a las arcas del Estado, al tiempo que provee de alimentos a los argentinos”.
De todos modos, se decidió dejar la puerta abierta al diálogo, aunque no sea ya solo con Fernández o con sus ministros. “Reforzaremos nuestros pedidos de audiencia a gobernadores, legisladores y fuerzas políticas, con el fin de transmitirles nuestra visión acerca del sector y las políticas que consideramos virtuosas para la producción, la actividad económica y la generación de empleo, que lejos están de las implementadas en las últimas horas”, marcaron los dirigentes agropecuarios, conscientes de que este es un año electoral.
Para terminar, el comunicado de la Mesa de Enlace define: “No deja de asombrarnos que, en el momento en que el país más necesita la cohesión para salir del atolladero en el que se encuentra como consecuencia de la grave crisis sanitaria, económica y social, el Gobierno nacional decida cerrarse así sobre sí mismo. Porque es lo que hace cuando decide prescindir del diálogo y de la búsqueda de consensos, que es a nuestro entender la única forma de lograr la construcción colectiva de la Argentina que todos deseamos”.